Unos 100 migrantes cubanos se desplazaron este jueves hasta la zona de Paso Canoas, en la frontera con Costa Rica, donde recibieron un salvoconducto para seguir rumbo hacia la ciudad de San José, según informó Martí Noticias.
Los ciudadanos de la Isla se encontraban en el campamento de Los Planes, en Chiriquí. Estos indocumentados ingresaron a Panamá frontera con Colombia y quedaron varados en Puerto Obaldía.
Esta noticia llega después de que el miércoles los presidentes de Panamá, Juan Carlos Varela, y de Costa Rica, Carlos Alvarado; se reunieron para tratar la situación de los migrantes.
"Los países están cooperando, es un corredor silencioso. Los están sacando de 50 en 50 repartidos en ómnibus de 25 plazas, previo examen médico que certifica el buen estado de salud", explicó al citado medio el activista cubano Yonimiler del Río.
"Una vez en San José, hay que llegar por medios propios hacia la frontera con Nicaragua", añadió.
Sin embargo el acceso al país nicaragüense es toda una incógnita, que podría desembocar en una nueva crisis migratoria. Hay que recordar que en 2015 el Gobierno de Nicaragua cerró la frontera y desplegó al ejército para impedir el ingreso de los cubanos en su territorio.
En aquella ocasión las fuerzas policiales repelieron el paso de unos 800 cubanos.
En cualquier caso el tránsito hacia Nicaragua tiene como objetivo final pedir asilo a las autoridades norteamericanas en el territorio fronterizo de México con Estados Unidos.
Panamá actualmente gestiona a más de 700 migrantes irregulares, el 57% de ellos cubanos y el resto de países como Haití, Camerún, Ghana, Eritrea, Etiopía.
El ministro de Seguridad Pública de la nación panameña, Jonattan Del Rosario, dijo el miércoles que "tampoco es la peor crisis de migrantes" que ha enfrentado el país en referencia a la crisis que se produjo a finales de 2015.
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