El Gobierno de Rusia ayudará a Cuba a restaurar su flota aérea, compuesta por varias aeronaves rusas, según explicó el viceprimer ministro ruso Yuri Borísov, quien se reunió el viernes con el vicepresidente del Consejo de Ministros de Cuba, Ricardo Cabrisas.
"Hemos encontrado una solución concreta para restaurar la flota de las aerolíneas cubanas. Hemos evaluado la aeronavegabilidad de la flota, que incluye los aviones (rusos) Iliushin Il-96, Túpolev Tu-204 y Antónov An-158", aseguró en declaraciones recogidas por EFE en el marco de la XVII sesión de la Comisión Intergubernamental que se celebró en Moscú.
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Desde Moscú se mostraron confiados en que la flota se restaure este 2019. De hecho ambos gobiernos ya han establecido el periodo de reparación y la cantidad de piezas de repuesto necesarias.
La cooperación entre ambos países también abarcará en los próximos años la modernización de la red ferroviaria y energética.
"Hemos avanzado mucho en un proyecto para actualizar la red ferroviaria de Cuba", dijo Borísov. Este proyecto se pondrá en marcha a lo largo de siete años y se hará en dos fases.
Sin embargo, el viceprimer ministro ruso se mostró cauto a la hora de concretar fechas. "Pienso que comenzaremos a implementarlo en un futuro cercano", añadió.
Borísov detalló que esta inversión asciende a unos 2.000 millones de euros
El pasado 4 de enero llegaron a territorio cubano siete locomotoras y el primer ferrobús ruso. Este lote formaba parte de las inversiones comprometidas con el gobierno de Vladimir Putin para revitalizar el sector ferroviario en la Isla.
Ayuda energética
Rusia también prestará ayuda para modernizar la infraestructura energética de la Isla. "Esto está vinculado, entre otros factores, a la necesidad de cubrirse ante los riesgos que representan la situación en Venezuela", explicó el dirigente ruso.
Por este motivo se pondrá en marcha un programa de largo plazo que se extenderá hasta 2030.
El objetivo es reducir la dependencia que tiene la mayor de las Antillas del suministro de petróleo venezolano, algo que coincide con uno de los periodos de mayor inestabilidad política del país latinoamericano.
La petrolera estatal venezolana PDVSA lanzó una licitación para comprar un cargamento de 700.000 barriles de crudo de los Urales rusos para su entrega del 15 al 23 de febrero en el puerto de Matanzas o en una terminal de Curazao.
La compañía, que no había comprado crudo ruso en el mercado abierto durante más de un año y que abastecía refinerías cubanas con crudos venezolanos, a principios de esta semana ofreció vender hasta 4,45 millones de barriles de crudo venezolano a clientes en efectivo, y comprar 1,2 millones de barriles de gasolina.
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