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Es casi imposible transitar por los repartos y barrios de La Habana. El estado en que se encuentran sus calles atenta contra la circulación de vehículos.
Es un arte el poder esquivar huecos, baches y zanjas. Algo que ha provocado más de un accidente y también contribuye a la rotura y deterioro de los autos que por ellas transitan. Súmele la desagradable acumulación de agua y basura que en estos lugares existe y que sirven como formidables criaderos de mosquitos.
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Igualmente penoso es el estado de abandono en que se encuentran las aceras lo que trae como consecuencia la circulación peatonal por las calles en estas zonas.
Eusebio vecino del reparto Vieja Linda, en el municipio Arroyo Naranjo, señala el tramo de acera de frente a su casa. "¿Ves que esta acera se encuentra en muy buen estado. Bien eso nos costó unos cuantos CUC a Julio, un vecino, y a mí. Por suerte pudimos hacerlo, pero el resto de la gente de aquí no tiene ni para comer".
Ellos se aburrieron de que en las Asambleas de Rendición de Cuentas les dijeran que hay que comprender la situación del país. Que no hay dinero para esos gastos.
Nadia, vecina del reparto Casino Deportivo explica que hace unos diez años, vinieron de Aguas de la Habana para ponerle el reloj contador y no le pusieron la caja plástica. "Me quejé y mucho tiempo después vinieron, rompieron un pedazo de la ya deteriorada acera y así la dejaron. Dijeron que otros eran los responsables de arreglarla”. Hace dos años ella espera por el arreglo de la acera y de un salidero que también dejaron.
Felipe tiene un Lada Comby. Vive en La Lisa. "Se me han partido dos veces las hojas de muelle por los baches que aquí hay. De día uno los puede ir esquivando, pero de noche con la poca luz que existe uno no los detecta y cae en ellos. Yiyo, mi vecino ya tiene setenta y algo y ha chocado en varias ocasiones por estar evitando las zanjas de esta misma calle. Él vive a dos cuadras de aquí y para allá el pavimento está peor. Ya no hay calle, solo tierra, piedra y los grandes huecos”, dice a CiberCuba.
Anastasio vive en Santos Suarez. "La locura y el desastre están a la orden del día. Esto no hay quien lo arregle. Hace 12 años taparon los baches, porque no arreglan, tapan. Y a los dos ya estaban peor. Entonces el año antepasado estaban aquí para empezar el 'bacheo' y apareció también una brigada de la Empresa de Gas Manufacturado. Venían a reparar las conductoras. Se armó tremenda discusión entre los jefes y al final se fueron los de pavimentación, nunca volvieron y la calle ya es prácticamente de tierra".
Roberto reside en la calle Atocha en la barriada del Cerro. “Hace ocho años canalizaron la Zanja Real y rompieron la calle para poner los tubos. Después la arreglaron, dicen ellos, pero a los cuatro o cinco meses ya estaba aquello desbaratado. Han reparado en más de cinco ocasiones y por último, hace seis meses, cerraron la calle al tráfico de vehículos. Colocaron una señal de tránsito, por lo que parece que la rotura va para largo".
El trabajo de siete empresas tiene que ver con los viales. ¿Nadie se ha percatado de tal desorganización, irresponsabilidad y negligencia?
CiberCuba conversa con un grupo de trabajadores de Viales y Pavimentación. Esteban, jefe de Brigada; Felo, chofer; un dirigente de nivel medio de la empresa que prefiere el anonimato, y Patricio, un operario del martillo neumático. Todos admiten que les pagan poco por un trabajo tan duro. Por la misma razón, y como no hay “búsqueda”, escasean los trabajadores y no se labora con calidad. Solo se les exige cuando trabajan en zonas “especiales”. Mientras no paguen como es debido, ellos no trabajan como debe hacerse. Interesa más la cantidad que la calidad y cumplir el plan. El Estado no cuenta con los recursos suficientes. La maquinaria es muy costosa y cuando se rompe es difícil arreglarla.
Esteban explica a qué se debe el desnivel de las calles. "Es sencillo. Si se tira una capa de asfalto encima de la otra y no se raspa como es debido, es lógico que se pierda el badén y el contén. Hasta las aceras van a desaparecer si no cambia el método y se hacen las cosas como es preciso", dice.
"Antes, cuando se iba a construir una urbanización, se delineaban las calles, con su badén, su contén y todo lo que fuera necesario. Ahora se hacen los edificios, y después, ¡vamos a ver qué pasa! Mira amigo, tenemos el mismo problema que todo el país: quién es primero, si el dinero o el trabajo o viceversa. Y como bien sabes, el Gobierno está en bancarrota. Y la irresponsabilidad brota en todos los lugares", apunta el dirigente medio.
Mariana, quien trabajó por más de veinte años en distintas instancias del Poder Popular afirma que "no solo hay situación con las calles y aceras. Los parterres, que son responsabilidad del Estado, se han dejado en manos de los particulares. Y ni te imaginas los líos que a veces se arman cuando alguien arranca una flor en uno de estos lugares. Si usted invierte miles de pesos al año en mantenerlos limpios y bonitos es lógico que los considere suyos y se molesta cuando alguien vine a romper”, señala.
Al comentarle sobre la situación de muchos parques y paseos de la Habana explica que solo son atendidos los parques, paseos o separadores centrales en determinadas avenidas de la ciudad como la 5ta Avenida, la vía Monumental, o aquellas que están cerca de lugares turísticos o históricos.
También argumenta que como se están explotando muchos parques en función de las zonas wifi se arreglan las aceras y las calles que los rodean.
A la pregunta sobre las causas del abandono de calles y aceras contesta que "hay dos causas fundamentales, se carece de los fondos para comprar equipos y material de construcción y para pagar lo debido. Por lo que también escasean los hombres necesarios para este tipo de trabajo".
Existen miles de kilómetros en la amplia red de calles y aceras con que cuenta La Habana. ¿Cuántos millones serán necesarios solo para reconstruir y reparar las calles y aceras de la capital? ¿Las arreglaran algún día o será otro de los cientos de problemas que el régimen está incapacitado de resolver en nuestro país?
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