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LA HABANA (Reuters) - Según declaraciones realizadas ayer lunes por un funcionario del sector, el turismo a Cuba, uno de los pocos puntos positivos de la debilitada economía de la Isla, ha caído debido al paso del huracán Irma y por el aumento de restricciones del Gobierno de EE.UU. para viajar a Cuba.
Aunque el número de visitantes aumentó casi un 20 % en 2017, cayó un 10 % en diciembre y ha bajado entre un 7 a un 8 por ciento este mes, dijo José Manuel Bisbé York, presidente del conglomerado cubano de agencias de viajes, Viajes Cuba.
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Cayó un 10 % en diciembre y ha bajado entre un 7 a un 8 por ciento este mes
Las llegadas desde EE.UU., que habían aumentado a raíz de la distensión de las relaciones entre La Habana y Washington en 2014, fueron las más golpeadas y se hundieron un 30 por ciento en diciembre, dijo Bisbé York a Reuters.
"Desde el huracán Irma, hemos visto disminuir las llegadas", dijo Bisbé York al margen de un evento organizado por la agencia de viajes estadounidense insightCuba para disipar las percepciones erróneas de los turistas sobre Cuba.
Irma azotó a la isla en septiembre, justo cuando el sector turístico estaba recibiendo reservas para la temporada alta, que va desde noviembre a marzo.
Las imágenes de destrucción hicieron que muchos visitantes potenciales se abstuvieran de viajar, aunque Cuba reparó sus instalaciones turísticas en dos meses, sostuvo Bisbé York. Las llegadas de canadienses, el mayor grupo de turistas a Cuba, cayeron entre un 4 a un 5 por ciento.
"Pero vemos esto como algo temporal y lo que estamos viendo es que las llegadas se están recuperando mes a mes", afirmó Bisbé York, agregando que Cuba continuará con sus planes de inaugurar más de 15 hoteles en la isla este año. "El primer trimestre será el más difícil, porque lógicamente el cambio en la percepción pública lleva tiempo", refirió.
El presidente republicano de Estados Unidos, Donald Trump, ha asumido una postura más hostil hacia Cuba que su predecesor demócrata Barack Obama, lo que aparentemente ha tenido un impacto más duradero que Irma.
El número de visitantes estadounidenses aumentó desde que el gobierno de Obama habilitó más exenciones a la prohibición al turismo en la isla y restableció los vuelos comerciales regulares y los cruceros. Las llegadas alcanzaron un récord de 619.523 el año pasado, frente a las 91.254 de 2014.
Pero el Gobierno de Trump emitió en septiembre una advertencia sobre los viajes a Cuba debido a una serie de presuntos ataques a la salud de diplomáticos estadounidenses en La Habana. Además, en noviembre entraron en vigor normas de viaje más estrictas.
(Reporte de Sarah Marsh; Editado en Español por Ricardo Figueroa)
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