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Brigadas del Ministerio de la Construcción se encuentran rehabilitando uno de los tramos de la Autopista Nacional de Cuba con la Carretera Central, la zona que se extiende desde la provincia de Sancti Spíritus hacia el oriente, informó la prensa local.
De acuerdo con el periódico Escambray, los constructores se han topado con baches “del tamaño de una piscina” que se extienden a lo largo de los 9 kilómetros que conectan la Autopista Nacional, en Taguasco, con la localidad de El Majá, en Jatibonico, (kilómetro 407 de la Carretera Central).
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“Regar asfalto vale un millón de pesos, date cuenta de que el calor es doble y sientes que la suela del zapato no aguanta, pierdes las plantas de los pies y no te queda más remedio que palear rápido para que no se enfríe la mezcla”, dijo al diario el rastrillero Carlos Basso.
Basso es uno de los integrantes de la brigada de bacheo de la UEB Pavimentación, perteneciente a la Empresa de Construcción y Montaje de Sancti Spíritus, que junto a la Brigada de Trinidad, acomete la reparación del importante vial, con un deterioro creciente que ya lo hacía prácticamente intransitable.
“Empezamos el 10 de octubre esta obra que se concibió en cinco tramos, en estos momentos ya se ha ejecutado todo el bacheo hasta el tercer ramal. En total se deben colocar unas 2 530 toneladas de asfalto, pero de ellas 730 son de bacheo y el resto es una carpeta de pavimentación que solo lo lleva el trayecto que va desde la Autopista hasta el puente elevado del ferrocarril en el barrio de Las Margaritas”, explicó a Escambray, Juan Fritze Valmaseda, jefe del Departamento Técnico de la UEB Pavimentación.
Según recoge el medio, existía un nivel de desgaste acumulado que atentaba contra la seguridad de la vía, de modo que resultó imperioso someterla a una reparación capital. El deterioro incluso se había acelerado a causa del huracán Irma y hubo que empezar con la planta de asfalto de Sancti Spíritus parada por reparación.
“Esta carretera no está diseñada para un tráfico tan intenso como el que estaba recibiendo. Es un vial de tercera categoría convertido en uno de primera y llevaba ya dos años sin que se arreglara. Después el huracán hizo lo suyo y los problemas se agravaron al punto de que ya no tenía condiciones para que los vehículos transitaran con seguridad”, aseveró Joel Cañizares Hernández, inversionista del Centro Provincial de Vialidad.
Por dicho tramo transitan más de 2 000 vehículos de cualquier tonelaje y porte diariamente, destacan los especialistas.
Al inicio de la obra, se realizó la fundición de una losa de 300 metros cúbicos de hormigón al pavimento rígido. El resto de los trabajos, que consiste en echar una carpeta de hormigón asfáltico y bacheo, durarán al menos unos dos años, porque la vía no cumple con los parámetros técnicos para la circulación de vehículos que hoy recibe.
“Es un problema de diseño que no vamos a resolver con esta reparación”, acotó el inversionista. “De hecho, hay partes del vial con grietas que en esta ocasión no se van a tocar porque no tienen ese gran nivel de deterioro, pero sí pueden llegar a colapsar con un futuro temporal similar al que trajo Irma”.
La Autopista Nacional de Cuba constituye la mayor arteria vial del país. Un primer tramo une a La Habana con las ciudades de Santa Clara y Sancti Spiritus y otro con Pinar del Río. Cuenta en total con cerca de 597 km de vía transitables, que comenzaron a construirse en los años 70, pero que se vio interumpida en 1990, producto del Período especial.
La Carretera Central, por su parte, es considerada una de las maravillas de la Ingeniería Civil cubana. Nace en el Capitolio Nacional y se divide en dos ramas, una hacia Oriente y otra hacia Occidente. Desde Pinar del Río hasta Santiago de Cuba tiene una longitud de 1,139 km. Su ejecución comenzó el 20 de mayo de 1927 y concluyó el 24 de febrero de 1931.
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