Carles Puigdemont, presidente del gobierno catalán, proclamó este domingo la victoria del "sí" en el referéndum de independencia que los tribunales declararon inconstitucional.
Puigdemont anunció que trasladará los resultados al Parlamento de Cataluña "para que se implementen".
Aunque el presidente de España, Mariano Rajoy, aseguró que "no hubo referéndum de independencia", Puigdemont afirmó que Cataluña ha "conseguido celebrar el referéndum que el Estado se ha esforzado tanto en impedir" y pidió a la Unión Europea que interviniera ante la "intransigencia y la represión".
"El gobierno español escribió hoy una página vergonzosa de su relación con Cataluña", dijo Puigdemont.
Este domingo Barcelona vivió momentos de fuerte tensión. En los lugares elegidos para la votación, la policía y la Guardia Civil, reprimieron con violencia a los votantes. Según los datos del Departamento de Sanidad catalán, citados por BBC, los enfrentamientos dejaron al menos 844 heridos.
Por su parte, el Ministerio del Interior dijo que "33 policías también sufrieron heridas de diversa consideración".
De acuerdo con las denominadas "leyes de desconexión", aprobadas en el Parlament y suspendidas después por el Tribunal Constitucional español, tras el referéndum, la cámara catalana deberá proclamar la independencia de Cataluña en un plazo de 48 horas.
El gobierno catalán afirma que un 90.09 % de los votantes apoyó la independencia, pese a que no hubo un censo oficial de las elecciones y varios colegios no pudieron abrir por orden judicial.
Mientras que Puigdemont planea la secesión en el Parlamento regional, Rajoy anunció que convocaría a todos los partidos a un proceso de diálogo en el Congreso español, pues según él, "lo ocurrido hoy fue solo un intento ilegal de violar la Constitución".
Hasta el momento no se sabe a ciencia cierta si se producirá o no la declaración unilateral de independencia, pues Puigdemont no fue concluyente al respecto.
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