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Con prólogo de Silvio Rodríguez, el libro Cuba Viva es el fruto de diez años de viajes del artista cubano a través de la Isla, en medio de una celebración que se aparta de la postal turística, aunque rezuma amor por lo nacional, ni se aparta tampoco de cierto sentido crítico con lo que descubriendo.
Según el periódico argentino Página 12, en una suerte de resumen de algunas de las imágenes que contiene el libro: “Una familia juega al dominó adentro de una pileta inflable, que a su vez está adentro de un living. Dos hombres carnean un chancho en plena calle, en vísperas de año nuevo. Un anciano sostiene orgullosa su mirada y sus medallas de combatiente en Playa Girón. Manos de todos colores se mezclan, aferradas al caño de una guagua, en una síntesis perfecta de multirracialidad. La bandera cubana convive en ropas y escenas con la norteamericana. Niños de sonrisa grande, paredes descascaradas, autos con lujos de más de medio siglo atrás, manicuras de vereda, coqueterías de entrecasa. Escenas cotidianas, instantes que, así capturados, abren pequeños mundos. Esa es la Cuba viva que retrata Kaloian Santos Cabrera”.
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En el prólogo de Silvio Rodríguez (a quien el fotógrafo ha seguido en Cuba en sus conciertos por los barrios, e invitado a sus giras), el libro es presentado en verso: “Cuba está viva / de niños y enamorados / de manos en colores / de familias montunas / de inmensas soledades / de libertad e indisciplina / de miradas al mar / de papalotes / de porvenires rotos / de voces inmortales / de abuelos padres e hijos / de pueblo a la intemperie / de ternuras legales e ilegales”.
Evidentemente el nombre del libro, Cuba Viva, también puede tomarse en orden inverso, es decir, como Viva Cuba, porque al igual que el filme homónimo de Juan Carlos Cremata, en sus páginas se percibe claramente la intención de exaltar cubanía, idiosincrasia y humor, sin concesiones al turismo salsero y nostálgico a la moda.
La presentación del libro ocurrió en el Centro Cultural Tres16 (Freire 316), donde quedó montada una muestra fotográfica, y hubo espacio para la actuación del trovador cubano Rafael de la Torre.
Nacido en Holguín, Santos Cabrera trabajó como fotógrafo y periodista en el periódico Juventud Rebelde y en la revista digital cubana La Jiribilla. Editó su primer libro, Con luz propia, con Ocean Sur, la misma editorial australiana que ahora publica Cuba viva.
Según el autor de Cuba viva “es un libro muy autobiográfico porque tiene que ver con un concepto de patria y de país. Es el libro de un cubano que nació en la Revolución, con un padre recontra fidelista, y parte de una generación que si bien sigue apoyando con fuerza ese proceso, tiene muchas críticas para hacer. Por eso entre otros va dedicado ‘a los cubanos donde quiera que estén’. Porque este libro también es para ellos.
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