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El próximo presidente de Cuba, a elegirse tras la retirada de Raúl Castro el próximo 2018, no llevará el apellido Castro, aseguró la hija del actual mandatario Mariela Castro, quien además expresó estar totalmente desinteresada en ocupar dicho puesto.
En entrevista exclusiva al corresponsal de la BBC en La Habana, Will Grant, Mariela Castro afirmó que en la isla actualmente no existe "una dinastía, no hay una sucesión, no hay nada de eso".
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Ante la pregunta sobre si se puede garantizar que el próximo presidente de Cuba no será de apellido Castro, Mariela respondió tajantemente: "Por supuesto".
“Es más, yo deseo que sea así (…) Las coincidencias históricas, se dieron contextos, se dieron cosas que bueno, dos hermanos Castro estuvieron muy unidos en la lucha y hubo una gran confianza y un gran respeto entre ellos. Pero no va a seguir así, eso fue esa coyuntura histórica. Ahora no la tenemos”, sostuvo.
De igual forma, la directora del CENESEX aclaró que no le interesa ocupar la presidencia porque prefiere ser ciudadana sin otras responsabilidades.
Sobre el venidero proceso electoral, Castro admitió que tenía dudas, “como todo el pueblo”, pero que siempre piensa positivo porque “un pueblo que ha luchado tanto tiempo, con tanto sacrificio, no se va a dejar quitar lo que ha logrado. Eso me da tranquilidad”.
Sin embargo, Mariela confiesa que “como parte del pueblo de Cuba” siente una “sensación de peligro”, por los posibles cambios que podría tener la Constitución de la isla.
“Estoy segura de que a la persona que quede elegida como máxima autoridad de nuestro gobierno siempre vamos a encontrarle virtudes y defectos. (…) Pero por supuesto, en los momentos oportunos, vamos a seguir trabajando para que la voz del pueblo participe en la toma de decisiones. Eso creo que es fundamental. Para mí esa es la verdadera democracia, la participación del pueblo en las decisiones. No el pluripartidismo”, acotó.
A la pregunta de Grant “¿Es Cuba una "democracia particular?”, Mariela Castro argumentó con el caso de Venezuela:
“Ningún gobierno en ningún lugar del mundo bajo las condiciones de violencia y hostilidad que está viviendo Venezuela, puede desarrollar ningún tipo de proyecto. En este momento, el gobierno liderado por Nicolás Maduro está tratando de sobrevivir a la fuerte oleada de violencia de la derecha venezolana que es de una crueldad infinita. Y además muy bien apoyada, fuertemente apoyada, financieramente apoyada, desde el exterior. Sobre todo desde Estados Unidos”.
Según Castro, el objetivo del “imperialismo” no es Nicolás Maduro, son los recursos de Venezuela. “En la historia de Venezuela, la derecha ha demostrado ser de una gran crueldad. Ha demostrado no interesarse nunca por las necesidades del pueblo venezolano. Esa es la historia de Venezuela. Y fue Chávez quien cambió todo esto, o empezó a cambiarlo, porque no lo ha terminado.”
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