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Un par de bombarderos B-1 de la Fuerza Aérea de Estados Unidos volaron sobre la Península de Corea en dos ocasiones a lo largo de la última semana, lo que ha desatado duras críticas por parte del gobierno de Kim Jong-un, informó CNN.
Los B-1 partieron de la base de la Fuerza Aérea Andersen en Guam y realizaron un simulacro conjunto con Corea del Sur y las fuerzas aéreas de Japón sobre la península coreana.
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“Ambas misiones estaban planeadas desde hace mucho tiempo y se decidió no darles demasiada publicidad para evitar una escalada en las tensiones”, aclaró el funcionario a CNN, luego de que Pyongyang acusara a EE.UU de llevar a cabo una "provocación militar" deliberada.
Los B-1B de Guam volaron sobre el Mar del Este y se unieron a operaciones de cooperación con medios de ataque estratégicos, incluyendo un portaaviones y un submarino nuclear, informó una cadena estatal de noticias norcoreana.
El comunicado acotó que “la situación en la península coreana, que ya es delicada, está llegando a un punto cercano a la guerra nuclear".
El portavoz del Ministerio de Defensa de Corea del Sur, Moon Sang-gyun, declaró hoy que el despliegue de bombarderos estadounidenses era parte de un esfuerzo para "responder a la amenaza de misiles nucleares y disuadir de las provocaciones de Corea del Norte".
La Administración de Trump también ha enviado a la región asiática un grupo de guerra encabezado por un portaaviones y ha desplegado un nuevo sistema de misiles antibalísticos en Corea del Sur.
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