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Una familia cubana de siete miembros denunció haber sido estafada por una red de tráfico de personas que les prometió pasaportes falsos para llegar a Estados Unidos.
Según recoge el Nuevo Herald, la familia pagó 8.000 euros por cada uno de sus miembros a la red de traficantes, un precio estipulado para un largo trayecto que los llevaría desde Rusia a Austria después a Alemania y finalmente a México, desde donde deberían cruzar la frontera hacia Estados Unidos.
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Sin embargo, todo este viaje quedó finalmente frustrado ya que jamás llegó la documentación prometida. Así, en Armenia quedaron atrapados Yoel Rodríguez y su mujer Mónica Reyes junto a sus hijos Karlitay Kevin, la madre de Mónica Elizabeth Calero y el esposo de ésta, Luis Miguel Cabrera.
"Hemos caído en manos de un estafador. Es una gran pesadilla lo que estamos viviendo", declaró Mónica Reyes a Univisión 23.
La familia vendió todos sus bienes en Cuba para afrontar los elevados gastos que les ocasionaría emigrar a Estados Unidos para empezar una nueva vida. Sin embargo, pocos días después de empezar lo que se esperaba como una larga travesía empezaron a llegar las malas noticias.
"Nos dijeron que íbamos a estar nada más 21 días, nos entregarían los documentos y viajaríamos. Ya estamos ilegales. Imagínese, tanto tiempo aquí en la espera", explicó Calero al Herald.
Calero relató también al citado medio sobre los estafadores: "Uno de ellos, Yasser Bencomo, nos dijo que si los denunciábamos nos daba donde más nos dolía, que nos secuestraba al niño".
Pese a las amenazas, la familia cubana hizo la denuncia a las autoridades armenias quienes descartaron emprender una investigación ni tampoco ofrecieron protección a los cubanos, quienes quedaron desamparados.
Elisabeth Calero explicó su difícil situación diciendo que son opositores del gobierno cubano, motivo por el cual fueron perseguidos por la Seguridad del Estado cubano hasta que salieron del país. Por este motivo, no pueden tampoco ahora regresar a Cuba.
Ante esta complicada situación, la familia pidió auxilio a la embajada estadounidense en Armenia aunque no han recibido todavía respuesta.
"Estamos encerrados sin salir de la casa por temor a que nos encuentre. Tememos por nuestras vidas y principalmente por la de los niños", dijo Calero. "Aquí las temperaturas son bajo cero y no tenemos ni calefacción ni alimentos", añadió.
Por el momento, y mientras las autoridades no ofrecen solución a la familia, un grupo de cubanos ha lanzado una iniciativa para recoger fondos y "mejorar un poco las condiciones", según explicó Jaime Parra, fundador de la iniciativa.
Sin embargo, y aunque parece que no se han emprendido acciones legales contra los traficantes, sí se conocen sus identidades. Según Calero, los culpables de la estafa fueron Bencomo, Leyine Gómez y su madre, Bárbara Limonta, quien sería el contacto de Cuba.
La identidad de los miembros de la red fue confirmada por Ramón Pereda quien actualmente reside en Florida pero fue estafado también de la misma red.
Según el testimonio de Pereda al medio miamense, él junto a su familia llegó a Armenia víctima de la misma estafa, aunque pudo escapar y viajar a Estados Unidos dejando atrás a su esposa, hijos y suegra.
Ramón Pereda fue el único miembro de la familia que recibió el prometido pasaporte aunque relató: "Después de un mes en Armenia nos dijeron que nos faltaban como 8.000 más"
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