A pesar de las numerosas muestras de apoyo recibidas dentro y fuera de la isla, al periodista holguinero José Ramírez Pantoja "solo podrá salvarlo un telefonazo o un milagro", según confesó a este redactor una fuente que asegura haber sido abogado en Cuba durante más de seis años.
"Fui abogado en Cuba por seis años. No espero nada bueno de los tribunales, solo un milagro o un telefonazo puede salvarlo", fueron las palabras de quien asegura que sus amigos se han mostrado muy solidarios con él.
Este redactor también consultó a una persona que durante muchos años se desempeñó como Fiscal Provincial en una de las provincias del oriente del país, y quien decidió no revelar su nombre.
"En muchos casos así, ya todo viene ordenado "desde arriba". Yo trabajé muchos casos en los que apenas si necesitaba esforzarme, porque de antemano se sabía la sanción", expresó esta fuente.
Lo cierto es que aunque "listo para sentencia" todavía hay que esperar que el tribunal municipal de Holguín dictamine la sentencia. Luego quedaría dos últimos pasos: el Tribunal Provincial y el Supremo (Nacional)
En su blog, el periodista holguinero publicó:
En horas de la mañana de este miércoles 12 de octubre, como estaba previsto aconteció la segunda comparecencia pública en el Tribunal Municipal de Holguín para la entrega de otras pruebas de lo que ha trascendido como "Caso Pantoja".
La comparecencia transcurrió normalmente con total apego a la ley. Ambas partes, la administración y el licenciado Rafael Jorge Noya Lafite, abogado que me representa, presentaron nuevas pruebas y yo tuve la oportunidad de que el respetable tribunal conformado al efecto escuchara mi parecer respecto a cuestiones abordadas en la primera comparecencia.
Después de firmar el documento en que quedó recogido todo lo dicho, el Tribunal dejó concluso el caso para dictar sentencia, la cual se conocerá próximamente.
José Ramirez Pantoja fue expulsado de su centro de trabajo, en la radio holguinera, luego que publicara en su blog, unas palabras pronunciadas por la Subdirectora de Granma, Karina Marrón, durante un encuentro de periodistas, y que por su carácter "fuerte" el gobierno cubano nunca divulgó.
Aunque Karina jamás perdió su puesto de trabajo por "su atrevimiento", José Ramirez Pantoja sí fue expulsado de su centro laboral de manera expedita. Ni el Órgano de Justicia Laboral de Base de su centro de Trabajo, ni la Comisión de Ética de la UPEC se pronunciaron a su favor.
Todo ha quedado entonces, en manos de los Tribunales.
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