“La Charanga habanera se fundó en 1988, gracias a la reunión de un grupo de jóvenes y talentosos músicos graduados de las escuelas de arte de Cuba, para desarrollar un proyecto de música popular cubana enmarcado en los años 40 y 50 y cumplir con un compromiso en el Sporting Club de Montecarlo”.
En 1994 en recién estrenado Palacio de la Salsa, en el antiguo salón Copa Room, del Hotel Habana Riviera ocurría un nuevo fenómeno. Como director estaba David Calzado, nacido en La Habana, a finales de los 50, hijo de Sergio Calzado, bailarín y cantante de la antológica banda Fajardo y sus Estrellas. Graduado de violinista junto a Rafaelito Lay (Orquesta Aragón) y Tony Calá (NG La Banda).
También fue miembro de la Orquesta Ritmo Oriental, aquella maravillosa charanga que disputó la preferencia del público a Los Van Van en los 70 y que contó con una nómina de lujo integrada por Juan Crespo Maza, Samy, Quiala y el güiro y la imaginación de Lazaga.
La Charanga habanera arrancó en 1988, gracias a la reunión de un grupo de jóvenes y talentosos músicos graduados de las escuelas de arte de Cuba, para desarrollar un proyecto de música popular cubana enmarcado en los años 40 y 50 y cumplir con un compromiso en el Sporting Club de Montecarlo”.
¡El Sporting de Montecarlo!, es una plaza conocida por los cubanos pues allí actuaron otrora Los Lecuona Cuban Boys y la Orquesta de Armando Oréfiche con músicos de renombre como Rafael Somavilla, Leonardo Timor y Yeyo Escalante.
El éxito del proyecto prolongó su estancia por cinco años. En ese tiempo La Charanga compartió escenario con luminarias de la magnitud de Stevie Wonder, Donna Summer, Barry White, James Brown, Ray Charles, Frank Sinatra, Charles Aznavour, Jerry Lewis, Kool and the Gang y Whitney Houston. También grabaron su primera producción discográfica con la firma DOM.
Muchas virtudes distinguían a la agrupación: el virtuosismo de sus músicos, la rica polirritmia de su sección percusiva, las letras con “gancho”, sencillas, con estribillos que reflejaban la vida diaria en una Cuba “que lucha de frente.
La Charanga con Leo Vera, el cantante, arrancó con Pensar en ti, de Pancho Céspedes, y después se lució con Tú eres. El público, llameante, coreaba, bailaba y muchas chicas les tiraron los sostenedores a los charangueros. La agrupación ofreció un espectáculo muy sostenido hasta la apoteosis final con Yo no camino más, popularizado por la Orquesta América.
“Esta es la banda que más hace por el espectáculo”, dijo el actor. Y así fue. La Charanga con sus coreografías espectaculares, casi circenses, elevaban la adrenalina de sus destinatarios.
En 1998 alcanzaron el premio de la orquesta cubana más popular del año, condición que mantuvieron en 1999, 2000 y 2001, pese a las cuantiosas giras por Japón, Europa, México, Argentina, Perú, Estados Unidos y el norte de África.
La Charanga Habanera fue nominada a los premios Grammy Latinos en 2003 con el disco Live in the USA, y en 2005 los postularon a los premios Orgullosamente latino en tres categorías: mejor video, mejor álbum, mejor grupo. Los lauros Cubadisco y Lucas, concedidos en Cuba, son también territorio charanguero.
La Charanga, por otra parte, se ganó un puesto en el Team Cuba de la Timba junto a Juan Formell y Los Van Van (Timba con songo), Adalberto Álvarez (Timba con son), José Luis Cortés y NG La Banda (Timba con jazz), Manolín, el médico de la Salsa, (Timba con rap) y Paulo FG y su Elite (Timba con sofocación).
Por la nómina de La Charanga han transitado estrellas como Leo Vera, Michel Maza, El Bony, Dantes Cardosa y Leoni Torres.
De las canciones que hicieron ese milagro ni hablar: El Bony está pasmao, Riki ricón, Soy cubano, soy popular, Juana Magdalena, Chico caramelo, El Charanguero mayor, El temba, La carátula, Lola Lola y Gozando La Habana, entre otras.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: