Carlos José García Domínguez, tío del joven cubano Eugenio García, que fue asesinado a finales de diciembre en Mayarí, Holguín, demandó mayor rigor de las autoridades hacia el asesino confeso, de quien dijo que “está jugando con la policía”.
“Hoy hace 37 días que ese sujeto está en instrucción provincial de Holguín, dice que fue él solo y no quiere decir dónde está ese dinero manchado de sangre que se robó”, se quejó García Domínguez en una extensa publicación en la que se dirigió directamente al Ministerio de Justicia, al Ministerio del Interior (MININT) y a “todos los niveles de la nación”.
“A mi sobrino no se le pudo hacer un velorio digno de un ser humano ya que se encontraba en estado de putrefacción. Ningún familiar pudo verlo, sellado el sarcófago, con su cuerpo desnudo, vacío, sin suturar, descuartizado por la autopista, enterrado en la profundidad de la madrugada como un criminal”, lamentó el familiar.
Carlos José García elogió la actuación en el caso del Departamento Técnico de Investigaciones (DTI) del MININT, del que destacó el respeto hacia la familia y la ética profesional”, pero arremetió contra la policía.
“Según ellos dieron a entender en todo momento están atados a un paquete de leyes, que le dan ventaja al delincuente, cuando debía ser lo contrario, actuar como un relámpago. El asesino confeso, traicionero, cobarde por naturaleza, desde el inicio del proceso, estando contra la pared, fue capaz de permitirse el lujo, de no decir dónde se encontraba el cuerpo”, se quejó el familiar del joven fallecido.
El tío de la víctima dice que el asesino, identificado como Yohandry Rodríguez González, “todo el tiempo ha estado jugando con la policía, mintiendo en todo momento” y demanda mayor severidad de las autoridades con el presunto responsable del crimen.
“Para este tipo de miseria humana, la familia, Mayarí, Cuba y el mundo, lo único que pide a gritos se llama pena capital”, concluyó.
Eugenio García salió de su casa el martes 26 de diciembre sobre las cinco de la tarde tras pactar una supuesta compra de unos 4,000 dólares con Yohandry Rodríguez González, quien era el supuesto intermediario.
Salió en bicicleta con el dinero encima -un millón 300 mil pesos- y a las 6:00 p.m. su familia lo llamaba y el teléfono ya daba apagado.
De inmediato se dio parte a la policía y ante la lenta acción de las autoridades los allegados al joven pidieron el apoyo de la comunidad para buscarlo.
Varios contingentes iniciaron la búsqueda y lo hallaron sin vida en la tarde noche del jueves 28 de diciembre en un bosque cercano al río de Arroyo Hondo.
El cuerpo de Eugenio apareció con signos de violencia, golpeado y con palos enterrados en el abdomen. Fue un crimen brutal, le dieron al menos cuatro puñaladas, lo golpearon con tubos y finalmente lo degollaron.
El dinero que el joven llevaba consigo fue enterrado presuntamente en un basurero y la bicicleta donde se trasladaba la lanzaron al río.
La propia familia localizó al intermediario en la falsa compraventa y lo llevó a la policía. En un primer momento se indicó que el acusado había tenido complicidad de otras tres personas.
El crimen conmocionó a la localidad de Mayarí, que desde entonces pide justicia y la pena máxima para los implicados.
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