Lejos de sentirse avergonzada o creer que debe ocultarla, Seidy La Niña se considera orgullosa de la cicatriz en su abdomen, "una cicatriz de guerra, de sobrevivencia", como la llamó en respuesta a un comentario de un seguidor.
Este domingo la artista cubana respondió a un fan que le sugirió que se tatuara o no mostrara la cicatriz que tiene en su barriga, resultado de la intervención a la que debió someterse luego de sufrir un terrible accidente de tráfico que casi le cuesta la vida.
Recién levantada, mientras leía muchos comentarios se topó con este, que no dudó en responder en el vídeo, donde mostró inicialmente que la cicatriz no solo era la parte visible sino todo el torso, incluida la parte cubierta por un tatuaje que llega hasta el pecho
"A decir verdad hoy por hoy me arrepiento, pero me arrepiento de haberme tatuado esto. Me lo tatué por el significado", dijo antes de responder por qué no se tapaba la cicatriz.
"Porque es mía, es mi cicatriz de guerra, es mi cicatriz de sobrevivencia, que me recuerda hoy en día por qué estoy viva, por qué luchar", añadió convencida y orgullosa.
"Honestamente, antes ni a mí me gustaba pero he aprendido a aceptarme, a quererme, con mis cicatrices, con mis estrías, con mi celulitis, con mis imperfecciones", agregó antes de defender que "está bien no tratar de pretender algo que no eres" y asegurar sentirse "orgullosa de esta imperfección".
En julio pasado, cuando se cumplieron nueve años del accidente que no solo casi le cuesta la vida sino que supuso una pausa en su trayectoria artísticas, Seidy celebró estar " riendo, viviendo".
"No les puedo mentir, el camino no ha sido fácil pero aquí estoy, cumpliendo mi propósito, compartiendo mi historia con todos ustedes", añadió en un emotivo vídeo compartido con sus seguidores, a los que aconsejó que "si no lo has encontrado no pierdas la fe, porque en la vida, todo se puede".
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