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Una cubana denunció los altísimos precios que tienen los cuadernos de trabajo para la enseñanza primaria que se venden en los negocios particulares, a los que pocas familias pueden acceder.
Niurka Toledo Escobar, una licenciada en educación preescolar que según sus redes sociales reside en Miami, compartió en su Facebook los precios de los cuadernos de asignaturas como Matemáticas, Escritura, El mundo en que vivimos, Trabajo y aprendo y A lee. Este último es el más caro de todos y cuesta 1,400 pesos.
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"Qué abuso, miren los precios de los cuadernos en Cuba. ¿Qué padre puede acceder a eso? El Estado no tiene para darles a los niños en las escuelas y los particulares se aprovechan de la situación. ¿De quién será la culpa?", preguntó.
"No deben permitir que vendan ese tipo de cosas que son tan imprescindibles para el aprendizaje de los niños", agregó.
En diciembre pasado, recién comenzado el curso escolar 2022-2023, el gobierno cubano se quedó sin papel para imprimir y confeccionar las libretas, libros y cuadernos para los alumnos.
Ena Elsa Velázquez Cobiella, ministra de Educación, aseguró que el papel del que disponían solo permitiría la impresión de una parte de los materiales, por tanto, debían reutilizar los libros y reducir la cantidad per cápita de libretas.
Cada vez más, el reinicio del curso docente se convierte en un dolor de cabeza para las familias cubanas, que deben afrontar los altísimos gastos de los útiles escolares de sus hijos.
Esta semana, un padre compartió en Facebook la lista del dinero que tendrá que desembolsar, que podría superar fácilmente los 20,000 pesos.
"Mochila, de 6,500 a 8,000 cup. Zapatos, 5,000 a 10,000 cup. Medias, 350 a 500 por cinco pares mínimo, hasta 2,500. Material escolar, 2,000 a 3,000", detalló Reinier David Sabater Rodríguez.
Además de "lo que hay que aportar para el aula, comprar algún libro e imprimir cuadernos porque no hay, y así seguimos", agregó.
En julio, trascendió el caso de una madre que vendió su pelo para comprar la mochila, el merendero y los zapatos que sus hijos necesitan para la escuela.
"Trabajo como una mula y nada, no me da, pues cuando pienso reunir para eso se me acaba el arroz, o el pollo, o el componente divino. Necesito me digan cómo se puede vender, más o menos lo tengo por la cintura y tengo bastante", precisó Leidy González.
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