El huracán Idalia tocó tierra este miércoles en la costa oeste de Florida como una peligrosa tormenta de categoría 3, provocando marejadas ciclónicas y lluvias que suponen un riesgo para la vida de las personas.
Idalia hizo su entrada a las 7:45 de esta mañana por la región poco poblada de Big Bend, donde el Panhandle de Florida se curva hacia la península. Los vecinos de esta región no suelen ser testigos de fenómenos de esta naturaleza y, según Local 10, no están acostumbrados a tales golpes.
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Residentes de Florida que viven en zonas costeras vulnerables recibieron la orden de hacer las maletas y marcharse mientras Idalia ganaba fuerza en las cálidas aguas del Golfo de México. A los que no lo hicieron, se les advirtió que buscaran un lugar seguro mientras avanzaba la poderosa tormenta.
“No pongas en riesgo tu vida haciendo algo tonto en este momento”, dijo el gobernador Ron DeSantis en una conferencia de prensa el miércoles por la mañana. “Esta cosa es poderosa. Si te quedas dentro, refúgiate hasta que te pase”.
Los últimos partes meteorológicos indican que la marejada ciclónica podría alcanzar hasta 4,5 metros (15 pies) en algunos lugares.
Por su parte, el Servicio Meteorológico Nacional en Tallahassee calificó a Idalia como “un evento sin precedentes”, ya que nunca se ha registrado ningún huracán importante que haya pasado por la bahía lindante con el Big Bend.
El estado, que aún enfrenta los daños persistentes causados por el huracán Ian del año pasado, teme un nuevo embate con resultados desastrosos.
Sin embargo, no todos los residentes en la región hicieron caso a la advertencia de irse. Andy Bair, propietario del Island Hotel en Cedar Key, dijo que tenía la intención de “cuidar niños” de histórico hostal. El edificio no se ha inundado en los casi 20 años que lo posee, ni siquiera cuando el huracán Hermine inundó la ciudad en 2016.
“Al ser cuidador del edificio más antiguo de Cedar Key, siento que necesito estar aquí”, dijo Bair. “Hemos demostrado una y otra vez que no vamos a desaparecer. Puede que nos sintamos un poco incómodos durante un par de días, pero eventualmente estaremos bien”.
En cuestión de horas, Idalia pasó de ser un huracán de categoría 2, a uno de categoría 3. Apenas unas horas antes del amanecer del miércoles, Idalia subió a categoría 4 para luego debilitarse ligeramente y regresar a la categoría 3 reforzada.
Los huracanes se miden en una escala de cinco categorías, siendo la categoría 5 la más fuerte. Una tormenta de categoría 3 es la primera en la escala considerada un huracán importante y el Centro Nacional de Huracanes advierte que una tormenta de categoría 4 provoca “daños catastróficos”.
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