Más de mil habanos que eran transportados por pasajeros en vuelos procedentes de Cuba y Panamá fueron detectados y confiscados por agentes aduaneros del Aeropuerto Internacional Ministro Pistarini, en Buenos Aires, Argentina.
Cuando los viajeros se presentaron en el control de la Dirección General de Aduana, el personal de ese organismo realizó la inspección habitual de las maletas a través de escaner, un método no intrusivo de control.
Al notar imágenes sospechosas en el equipaje de los cuatro pasajeros, los agentes procedieron a la inspección física de cada maleta, en las que encontraron en total 1,286 habanos escondidos entre las pertenencias personales de los viajeros, según dio a conocer la prensa de ese país.
Las autoridades presumieron que "dada la cantidad" la mercadería tendría fines comerciales.
El personal de la Aduana confiscó la carga, valorada en casi 5,500 dólares, por tratarse de una transgresión al artículo 977 del Código Aduanero.
Además, el ingreso de esa clase de mercancía a territorio argentino con fines de comercialización requiere la intervención previa del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA). Avales que no pudieron ser exhibidos por los viajeros en cuestión, lo cual supone un agravante adicional.
La multa por la infracción podría alcanzar un máximo de 4,839 dólares.
Al cierre de esta nota no ha trascendido la nacionalidad de los cuatro viajeros implicados.
En julio, un cubano que arribó al Aeropuerto Internacional de Miami en un vuelo de American Airlines procedente de Cuba fue arrestado por tratar de ingresar cien cajas de tabacos.
En ese caso el sospechoso, de 44 años, enfrentó cargos vinculados con posesión, venta y distribución ilegal de cigarrillos, a los que se añadió uno por presunta falsificación de etiquetas.
Un oficial de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) detectó el supuesto contrabando de tabacos al encontrar varias cajas de de la marca H. Upmann gravados, sin etiquetas, y múltiples cigarros Cohíba individuales. Posteriormente, un inventario reveló que había 50 cajas de cada marca.
Las autoridades determinaron que los paquetes no cumplían con las normas federales sobre etiquetas de advertencia precisas, además de tratarse de mercancía cuya venta no está permitida en EE.UU. Desde septiembre de 2020 los viajeros procedentes de Cuba no pueden retornar a territorio estadounidense con productos de alcohol y/o tabaco adquiridos en la isla como equipaje acompañado para uso personal.
El mes pasado, otro cubano, en ese caso radicado en España, fue retenido en un aeropuerto de la nación ibérica por supuesto contrabando de tabacos y cigarros, luego de que las autoridades encontraran 224 habanos y varias cajas de cigarros en su equipaje.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: