Cuba: Cinco años del milagro Mailén

Cinco años después, el 18 de mayo de 2018 sigue doliendo como el primero. "Que en paz descansen todos los fallecidos, mi corazón hoy está con todos sus familiares y amigos, un abrazo enorme. Gracias a Dios por mi vida", escribía hace un año Mailén Díaz Almaguer, única superviviente de la tragedia, evocando aquel viernes aciago en La Habana.

"No es lo mismo hablar de algo porque oíste a alguien contarlo, que enseñar tus cicatrices", aseguró Mailén, en referencia a un accidente aéreo ocurrido en China, en 2022.

Y este amargo quinquenio para muchos cubanos y especialmente duro para las familias de las víctimas nacionales y extranjeras, casi podría reconstruirse con reflexiones de la única superviviente de la tragedia, que sigue pidiendo justicia.

"Ningún obstáculo es tan grande cuando tu voluntad por vencer es mayor. Esfuérzate cada día y lucha por tus sueños", declaró la joven, nacida en la nororiental provincia de Holguín -destino del avión siniestrado- y que tenía 19 años el día de la desgracia.

El accidente del Boeing 737, en mayo de 2018, fue el segundo con más muertes en Cuba, solo precedido por otro de Cubana de Aviación, en 1989. Mailén Díaz Almaguer es también la superviviente única número 25 de accidentes aéreos en el mundo, según registros de entre 1948 y 2019.

Aquel viernes terrible

Mailén fue una de los cuatro pasajeros que pudieron ser rescatados con vida del Boeing de la mexicana Global Air, arrendado por Cubana de Aviación.

En el Hospital Universitario General Calixto García, de la capital cubana, murieron Grettel Landrove Font (23 años) y Emiley Sánchez de la O (39) durante la semana siguiente al accidente. Mailén fue la única que sobrevivió a la descomunal explosión y todavía nadie se explica cómo salió despedida de la masa de humo y fuego en que se convirtió el avión, tras el impacto contra la tierra en Rancho Boyeros.

Mailén Díaz Almaguer es -además- el resultado de la profesionalidad y entrega del personal médico cubano que luchó por salvarla en tres centros asistenciales de La Habana, un sufrimiento en que también fueron decisivos su vitalidad y su resistente salud.

Hija del milagro

Ser el único superviviente de un accidente aéreo es una experiencia que marca de por vida. Mailén, que supera ya los 24 años que cumplió el pasado 23 de diciembre, no dejará de preguntarse porqué fue la única que sigue viva.

Tras un duro proceso de recuperación paulatina en los hospitales habaneros Calixto García, Hermanos Ameijeiras, y el Centro Internacional de Restauración Neurológica de Cuba (CIREN), Mailén se convirtió en milagro y voz de las víctimas sin voz.

"Lo más bonito en la vida es saber que has podido con todo. El amor propio es una de las cosas más importantes", subrayó en su evocación de la tragedia que le cambió la vida y dejó viuda.

"Le doy muchísimas gracias a Dios por haberme dado una segunda oportunidad de vivir y por estar mejor cada día. Agradecer a todas las personas que se han preocupado... a los médicos, enfermeras, fisioterapeutas, aquellas personas que han contribuido de una forma u otra en mi recuperación y me han ayudado con sus oraciones y buenos pensamientos, a mi familia en especial. Un abrazo fuerte para todos y que Dios los bendiga”, escribió en Facebook.

Accidentes aéreos en Cuba

El Boeing 737, que hace cinco años se estrelló en La Habana, fue el segundo peor accidente de avión en Cuba, superado solo por el accidente de un Il-62M de Cubana de Aviación, que el 3 de septiembre de 1989, tras despegar con rumbo a Milán (norte de Italia) y Colonia (Alemania), se precipitó a tierra y provocó la muerte de 171 personas, entre viajeros y vecinos residentes en las inmediaciones del aeropuerto internacional José Martí.

Otro accidente aéreo con víctimas mortales, ocurrió en noviembre de 2010, cuando se estrelló una aeronave ATR-72 de la compañía cubana Aerocaribbean, que cayó en una zona rural de la provincia central de Sancti Spíritus; con un saldo de 68 muertos, entre ellos, 28 extranjeros de 10 nacionalidades.

En abril de 2017, un AN-26, de fabricación rusa, perteneciente a las Fuerzas Armadas Revolucionarias (FAR), despegó del aeropuerto de Playa Baracoa, noroeste de La Habana, y colisionó contra la loma de La Pimienta, en Candelaria, causando la muerte de ocho militares, incluida la tripulación.

Otras supervivientes de accidentes aéreos

No son muchos los supervivientes únicos de tragedias aéreas en el mundo. Las reseñas recogen casos que se salvaron por estar en el baño en el momento del accidente, otros porque salieron despedidos justo a tiempo –como Mailén–, y también por pura casualidad. Estos son algunos de los más estremecedores.

Océano Índico, 2009. La Niña milagro, Bahia Bakari, tras estrellarse el avión en el que viajaba, se aferró a un pedazo del fuselaje y evitó ahogarse, resistiendo nueve horas de zozobra, hasta que fue rescatada. Murieron 152 ocupantes del avión de Air Yemenia, entre los que estaba su madre.

Erika Delgado, otra niña milagro que tenía 10 años en 1995, cuando un DC-9, con 52 personas a bordo, se estrelló en María La Baja, Colombia. Erika fue la única superviviente.

Cecelia Cichan tenía 4 años cuando el avión en que viajaba se estrelló al oeste de Detroit, Estados Unidos, en 1987. De los 155 pasajeros a bordo, sólo ella sobrevivió. Después de superar el trauma, se hizo psicóloga.

Juliane Köpcke, cuya historia ha protagonizado dos películas. El 24 de diciembre de 1971, el avión en el que viajaba se desintegró en el aire, con 93 pasajeros a bordo. Muriendo todos, menos ella. Juliane, que entonces tenía 17 años, salió despedida junto a su asiento y cayó sobre las frondosas copas de los árboles del Amazonas, que amortiguaron el impacto. Cuando despertó, después de varias horas inconsciente, estaba en tierra, sentada sobre su butaca y en mitad de la selva. Tras nueve días vagando por la selva fue encontrada por unos campesinos.

Todas son coprotagonistas de la huella cruenta de las desgracias y símbolos de milagros en el mundo, como el de la cubana Mailén Díaz Almaguer, que volvió a nacer en la tragedia de La Habana, que un día como hoy cubrió de luto a Cuba entera.