En apenas unas horas el gobierno de Estados Unidos desactivará la orden sanitaria conocida como Título 42, que desde marzo de 2020 permitía a las autoridades migratorias la expulsión inmediata de todas las personas indocumentadas en los cruces fronterizos por México, aun cuando buscaran asilo por motivos de persecución en sus países.
La invocación del Título 42 en tiempos de pandemia permitió aminorar el flujo migratorio por la frontera sur y expulsar a unos 2.7 millones de indocumentados en tres años. Aunque el éxodo desde Cuba consiguió evadir las regulaciones más estrictas en virtud de consideraciones humanitarias y excepciones para el asilo, un total de 20,093 cubanos fueron rechazados en la frontera bajo la prohibición de salud del COVID-19.
A las 11:59 pm (hora del Este en EE.UU.) de este jueves 11 de mayo expirará el Título 42, que está amparado por la Ley de Salud Pública de 1944, y se abrirá una nueva etapa para el accidentado sistema migratorio de la nación americana. Pero la suspensión de la normativa no debe ser interpretada como una flexibilización del proceso de ingresar a Estados Unidos, pues la administración de Joe Biden en coordinación con el Departamento de Seguridad Nacional (DHS), agencias del orden y efectivos militares han trazado un plan de contingencia para blindar la frontera y tratar de impedir el caos que se pronostica.
“El fin del Título 42 no significa que la frontera estará abierta”, enfatizó este miércoles el secretario de DHS, Alejandro Mayorkas. La realidad es que a partir del 12 de mayo habrá regulaciones más severas, controles más estrictos y una redoblada presencia de agentes migratorios, cuerpos policiales y fuerzas militares para enfrentar el reto.
Ante las numerosas preguntas recibidas a través de foros de redes sociales, desde Cuba, México, Centroamérica y otros países del continente, CiberCuba ofrece aquí algunas recomendaciones a manera de respuesta para los cubanos que están en tránsito o pretenden venir a Estados Unidos en momentos de cambios en el mapa migratorio de la frontera.
1. Evite presentarse o intentar ingresar por la frontera si no tiene cita programada en puntos de inmigración. Las personas que crucen sin autorización o sin haber utilizado una vía legal, sin tener programada una hora de llegada a un punto de entrada mediante la aplicación CBP One, se considerará que no reúnen los requisitos para obtener asilo, salvo que se aplique una excepción. Si se les expulsa, se les prohibirá volver a entrar en el país durante al menos cinco años y podrán ser objeto de encausamiento penal si reinciden en el ingreso ilegal. No lo haga sin cita aunque usted pueda demostrar poderosas razones para su caso de asilo. En la mejor de las excepciones, puede suceder que sea puesto en custodia en un centro de detención, sin opciones inmediatas para ser liberado bajo supervisión. Particularmente riesgoso será en los primeros días de suspendido el Título 42, cuando estarán todas las fuerzas de control en máxima tensión y las decisiones sobre casos específicos pueden no resultar las más adecuadas.
2. Habrá despliegue adicional de fuerzas operativas. Desde este miércoles llegó un primer grupo de 550 efectivos militares para apoyar a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) en la frontera sur. Se unirán a los 2,500 efectivos de la Guardia Nacional ya desplegados allí. El apoyo de estas fuerzas incluirá entrada de datos, apoyo de almacenamiento y aumento de las actividades de vigilancia y detección para que los agentes y oficiales de CBP puedan salir al terreno a asegurar sus funciones. Los mil militares restantes se anunciarán en las próximas horas e incluirán personal del Ejército, la Infantería de Marina y las Fuerzas Aéreas. En total habrá más de 24 mil agentes del orden en las zonas de cruce y mil coordinadores de la Patrulla Fronteriza. La disponibilidad de autoridades para manejar grupos de inmigrantes será mayor.
3. Habrá mayor capacidad de expulsión. La CBP y la Oficina de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) están ampliando aún más la capacidad de detención, aumentando los vuelos de expulsión. Se inauguraron esta semana dos centros de detención, y la ICE tiene previsto habilitar de inmediato otras 5,000 camas. El propósito es procesar rápidamente a los inmigrantes y someterlos a procedimientos expeditos de expulsión. En el caso de los cubanos, un reciente acuerdo ratificado con el gobierno de México días atrás, facilitará retornar a territorio mexicano a quienes ingresen ilegalmente en Estados Unidos. Desde México pudieran ser enviados por vía aérea a La Habana, como ha venido sucediendo desde el pasado año. Igualmente, ICE mantendrá al menos dos vuelos de deportación a Cuba, en los cuales pueden incluirse personas que perdieron sus casos de asilo o fueron registrados con un documento I-220B a su entrada al país.
4. Balseros serán devueltos de manera expedita. Los involucrados en travesías marítimas por el Estrecho de Florida tendrán el mismo tratamiento de los inmigrantes irregulares en puntos de la frontera terrestre. A los que consigan esquivar la intercepción en alta mar y logren tocar tierra no se les valorará su posibilidad de asilo y serán sometidos a la misma prohibición de entrada al país en cinco años, con posible encausamiento criminal en caso de retornar por la misma vía. Los balseros llegados a territorio costero serán procesados y devueltos en vuelos de deportación. Tanto los interceptados en el mar como los que consigan tocar tierra serán imposiblitados de participar en el programa de parole humanitario con patrocinio económico.
5. Si está varado o en tránsito su mejor opción es CBP One. Desde este miércoles comenzaron los cambios para mejorar la eficiencia de la aplicación para obtener citas de asilo mediante la aplicación telefónica CBP One. Se habilitará un tiempo adicional para navegar por la aplicación y completar la solicitud de cita con suficiente tiempo. Se podrán solicitar citas en cualquier momento durante un período completo de 23 horas y, si se les asigna una cita, dispondrán de otro periodo de 23 horas para confirmarla. El número de citas diarias asignadas llegará hasta aproximadamente mil a partir del 12 de mayo, y se evaluará continuamente la ampliación de la capacidad de citas disponibles a medida que las operaciones consigan mayor eficiencia. Si usted está varado en Centroamérica o México, o planea venir a la frontera desde cualquier otro país, su mejor alternativa es no desesperarse y acudir a CBP One.
6. No descarte asistencia en los centros regionales. Si está de tránsito o planea venir de manera irregular a Estados Unidos debe considerar también valorar la opción de los centros regionales de procesamiento que funcionarán en Centro y Suramérica, los primeros en Guatemala y Colombia. El Departamento de Estado tiene previsto abrir finalmente unos 100 centros regionales de tramitación en lugares clave y en los próximos días pondrá en marcha una plataforma en línea para que las personas puedan concertar citas en ellos. Más de 140 funcionarios federales, entre ellos del DHS y del Departamento de Estado, así como representantes de la Organización Internacional para las Migraciones y del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados, apoyarán estos centros, que servirán para orientar a los inmigrantes hacia vías legales antes de llegar a la frontera suroeste. Los centros evaluarán si las personas cuentan con los requisitos para el reasentamiento como refugiados en Estados Unidos, califican para programas de reunificación familiar y parole humanitario, o pueden ser elegibles para visados especiales de trabajo en Canadá y España.
7. Opciones en marcha: Parole humanitario y visas de inmigrante. Para los cubanos que permanecen en la isla, emigrar legalmente a través del parole humanitario con patrocinio económico y la reclamación familiar prevalecen como las alternativas más recomendables y seguras. El programa de parole implementado por la administración Biden ha permitido llegar a Estados Unidos a más de 16 mil cubanos desde su implementación el pasado enero. Hay quejas por demoras de hasta 120 días en el procesamiento de las solicitudes, pero en cualquier caso es una avenida mucho más dinámica que la espera de años por acumulación de casos de peticiones familiares. En cuanto a las visas de inmigrante para cubanos, el número escaló a 25,356 al término de marzo, lo que supera en solo seis meses el compromiso establecido para un año al amparo de los acuerdos migratorios bilaterales. La reanudación de los servicios consulares en la embajada estadounidense en La Habana ha conseguido disminuir los retrasos, que ascendían a unos 100 mil expedientes en espera.
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