Los médicos cubanos Landy Rodríguez Hernández y Assel Herrera Correa continúan desaparecidos desde hace exactamente cuatro años, tras ser secuestrados en Kenia por el grupo yihadista Al Shabab.
Los facultativos, que formaban parte de un contingente de un centenar de profesionales cubanos que llegaron en 2018 a Kenia, se desplazaban en un convoy al hospital de Mandera protegidos por escoltas armados cuando fueron interceptados tras un tiroteo en el que falleció uno de los policías que velaban por su seguridad.
El canciller cubano, Bruno Rodriguez Parrilla, recordó la fecha y a los dos galenos secuestras en ese país africano.
"Seguimos realizando gestiones ininterrumpidamente para lograr su retorno a salvo a Cuba", escribió en Twitter, sin dar más explicaciones.
Desde entonces, el Gobierno de Kenia aseguró que se hacían gestiones para rescatarlos, pero los esfuerzos resultaron infructuosos.
"Nadie sabe el paradero actual de los dos médicos cubanos. Tampoco tenemos información actualizada sobre el estado actual de su bienestar", aseguró este miércoles una fuente de la Agencia Nacional de Inteligencia y Seguridad (NISA) somalí, según un reporte de la agencia EFE.
La fuente dijo que se cree que están retenidos en algún lugar de un bastión de Al Shabab, pero en los últimos dos años no ha surgido nada nuevo.
"Kenia también debe rendir cuentas, ya que los secuestros tuvieron lugar en su suelo y se sabe que los combatientes de Al Shabab cruzan las zonas fronterizas entre Somalia y Kenia. Es un caso sin resolver, pero eso no significa que la gente deba perder la esperanza", concluyó.
El embajador de Cuba en Kenia, Juan Manuel Rodríguez Vázquez, declaró que trabajan todos los días para garantizar su regreso y espera que el acercamiento diplomático entre ambos países pueda ayudar a averiguar qué pasó con los médicos.
"Por supuesto, tenemos presente la fecha del cumplimiento de los cuatro años (del secuestro). Trabajamos todos los días para garantizar el regreso de ellos", declaró, tras presentar sus cartas credenciales en Mogadiscio ante el presidente de Somalia, Hassan Sheikh Mohamud, en calidad de embajador no residente ante ese país.
Se sabe que con el mandatario habló de "temas bilaterales", pero no ha trascendido si se abordó el tema de los dos galenos.
Al Shabab, afiliado desde 2012 a la red terrorista Al Qaeda, perpetra frecuentes ataques en Somalia y países vecinos como Kenia y Etiopía para derrocar al Gobierno somalí e instaurar un Estado islámico ultraconservador.
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