Humberto López y otros asistentes por parte del régimen a la segunda jornada del juicio en Londres contra el Banco Nacional de Cuba (BNC) y el gobierno cubano por la demanda de 72 millones de euros interpuesta por la compañía británica CRF I Limited, fueron increpados a la entrada del edificio donde se celebra el proceso judicial.
“¡Hijo de p...! ¡Asesino! ¡Vas a pagar!”, “¡Abajo la dictadura cubana!” "¡Viva Cuba libre! ¡Patria y Vida!", gritaron cubanos congregados a la entrada del tribunal, que no daban crédito a que el vocero Humberto López, abogado de profesión y quien ha estado pendiente del caso en los medios de prensa oficialistas, estuviera en el lugar.
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"¡Dávalos, vas a pagar tú y tu gente!”, “¡Donde quiera que vayan no van a tener paz más nunca hasta que no estén en la cárcel!", gritaron a Rodolfo Dávalos Fernández, quien funge como Presidente de la Sociedad Cubana de Derecho Mercantil y Presidente de la Corte Cubana de Arbitraje Comercial Internacional.
Especialmente tenso fue el arribo de la abogada Lourdes Dávalos, hija de Rodolfo, quien se bajó de un auto sonriendo y llevando en su brazo un bolso de la marca Louis Vuitton personalizado con sus iniciales, algo que fue notado de inmediato por los manifestantes, que la tildaron de “mafiosa”.
"¡Mírala, aquí está Lourdes Dávalos! Su hijo vive en Miami. Mira el bolso de Louis Vuitton que tiene. Mafiosa tú y tu padre. No van tener paz más nunca, nerviosita que está”, gritaron los congregados en el lugar.
En su perfil de Instagram, Lourdes Dávalos compartió en las últimas horas varias fotos posando en la capital inglesa al más puro estilo influencer, pero las borró luego.
Graduada de derecho en La Universidad de La Habana pero con un título revalidado en la Universidad Complutense de Madrid, Lourdes Dávalos León, de 38 años, trabaja desde 2011 para el despacho español Uría Menéndez, desde donde coordina el denominado Cuban Desk.
Según se puede leer en la web del despacho, Lourdes Dávalos "se centra en el asesoramiento a inversores extranjeros (tanto entidades privadas como gubernamentales) de distintas jurisdicciones, en contratación internacional, financiación de proyectos y creación de negocios conjuntos en proyectos de inversión extranjera en Cuba (incluida la Zona Especial de Desarrollo del Mariel)".
Este lunes comenzó ante el Tribunal Superior de Justicia de Inglaterra y Gales, con sede en Londres, la demanda de 72 millones de euros que interpuso contra el régimen en 2018 la compañía británica CRF I Limited.
En el inicio del juicio la parte cubana dijo que rechaza al fondo de capital riesgo británico CRF como tenedor legítimo de su deuda por ser un "fondo buitre" y no un "acreedor responsable".
El abogado de CRF, por su parte, subrayó los intentos de sus representados por llegar a acuerdos con el gobierno cubano para la solución de la deuda e indicó que la opción final fue recurrir a la justicia.
El juicio podría derivar en sanciones de peso para el régimen, aunque la semana pasada el gobierno cubano auguró que la demanda interpuesta por CRF no afectará a la economía nacional.
Aseguraron que la decisión del tribunal inglés no tendrá implicación alguna porque “se trata de una cuestión procesal de jurisdicción" y que en ningún caso discutirán montos financieros de la deuda. Aseguraron, además, que no están comprometidas las finanzas del país ni las de la institución financiera cubana.
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