La provincia de Sancti Spíritus presenta uno de los escenarios más complejos del país en el control del dengue, con varios serotipos de la enfermedad circulando y elevadísimos índices de infestación.
El diario local Escambray describe un escenario preocupante, en medio de la escasez de recursos para fumigar contra el agente transmisor, el mosquito Aedes Aegypti: “casos y más casos de infectados; cuadras donde lo mismo han enfermado niños que adultos mayores, que jóvenes; personas que han advertido la enfermedad cuando se han visto la erupción o el rash; pacientes que —a sabiendas de los riesgos— han estado cinco días con fiebres altísimas en cama y automedicándose, otros que han llegado al borde de la muerte y algunos que no han logrado sobrevivir”.
La doctora Yurien Negrín Calvo, vicedirectora del Centro Provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología, explicó al rotativo que al cierre de la semana 40, correspondiente a la primera de octubre, la tasa de incidencia (riesgo de enfermar) de casos sospechosos fue de 113.6 por 100 000 habitantes, dentro de las más altas del país.
Asimismo, que los municipios de Taguasco, Cabaiguán y Sancti Spíritus sobrepasan la media provincial para el riesgo de enfermar por dengue, a pesar de lo cual no se realiza la fumigación contra el mosquito Aedes Aegypti en el 100 % del universo, sino en “cuadrantes estratificados según el riesgo para la transmisión de la enfermedad”.
Agregó que en la provincia, donde asegura que “no ha muerto ningún paciente”, circulan los serotipos Dengue 2 y 3; pero que en etapas anteriores han circulado también los diferentes serotipos del dengue, lo que resulta en que muchos pacientes evolucionen a las formas graves.
“Hay personas que comienzan con los síntomas, no acuden al médico de manera oportuna y han llegado tarde al sistema de salud, lo cual hace que cursen con signos de alarma que, al no ser tratados a tiempo, pueden llegar al estado grave”, señala Negrín Calvo.
De acuerdo con la especialista, el dengue tiene signos de alarma como “dolor abdominal intenso y mantenido, vómitos frecuentes, diarreas abundantes, descenso brusco de la temperatura, lipotimia o decaimiento excesivo, irritabilidad, somnolencia, sangrado de las mucosas, aumento de tamaño del hígado, presencia de líquidos en cavidades y deshidratación”.
Asegura que en los hospitales de la provincia—tanto el Hospital General Provincial Camilo Cienfuegos y el Hospital Pediátrico Provincial José Martí— existen camas destinadas para la atención a los casos con signos de alarma y graves.
Otras provincias cubanas también presentan un panorama difícil.
La situación del dengue en Guantánamo se ha agravado por la escasez de insecticida y combustible, y al “cierre de la semana 40 terminó siendo la provincia de mayor incidencia de dengue en el territorio nacional”, dijo Leonel Heredia Carpintrú, Subdirector de Epidemiología del Centro Provincial de Higiene, Epidemiología y Microbiología.
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