Las autoridades estadounidenses recuperaron este sábado otros tres cadáveres del naufragio ocurrido cerca de los Cayos de Florida la semana anterior, cuando una embarcación con 27 balseros cubanos zozobró mientras el huracán Ian avanzaba hacia la costa oeste del estado con vientos de 250 km/h.
“La Oficina del Sheriff recuperó los cuerpos de tres mujeres fallecidas de los manglares cerca de la Estación Aérea Naval de Key West aproximadamente a las 3:30 pm del sábado”, indicó un comunicado de la oficina del jefe de la policía del condado de Monroe.
Se trata de la tercera ocasión desde el jueves que la Oficina del Sheriff de Monroe “retira cadáveres en el área de Boca Chica Key y el canal”. En total, se han recuperado los cuerpos de cuatro mujeres y un hombre.
El viernes, aproximadamente a las 2:45 p.m., la Guardia Costera de EE.UU. halló en los manglares cerca del canal Boca Chica el cadáver de una mujer, y un día antes, encontró el cuerpo de un hombre no muy lejos del mismo lugar. Ninguno de los cadáveres recuperados ha sido identificado aún.
Tras las primeras labores periciales, los detectives del condado creen que se tratan de inmigrantes cubanos y descartaron que las muertes se debieran a motivos criminales. No obstante, aclararon que las conclusiones sobre el trágico incidente esperan por los resultados de la autopsia, que todavía están pendientes.
El pasado 28 de septiembre, luego de producirse el hundimiento de la embarcación, cuatro balseros consiguieron nadar hasta Stock Island, donde informaron a las autoridades que otros 23 inmigrantes que viajaban junto a ellos estaban perdidos en las aguas turbulentas del Estrecho de la Florida.
La Guardia Costera lanzó de inmediato un operativo de búsqueda que permitió el hallazgo con vida de tres balseros, el mismo miércoles, y de otros dos más, al siguiente día.
Aún permanecen desaparecidas 13 personas.
Los sobrevivientes del naufragio contaron que estuvieron seis días en el mar bajo condiciones extremas, y aseguraron que de ese tiempo pasaron dos días y dos noches cerca de las costas cubanas sin que los rescataran.
“Estuvimos dos días y dos noches cerca de la costa de Cuba y no nos rescataron. A trece millas de distancia, encendimos cosas y nada. Nadie nos rescató”, dijo uno de los inmigrantes en declaraciones recogidas por el canal Local 10.
Aunque el reporte televisivo no lo identificó por su nombre, CiberCuba confirmó que se trataba de Dairién Martínez, de 29 años y natural de Matanzas. Según su testimonio, estuvieron en el mar desde el viernes 23 de septiembre a la una de la madrugada hasta el martes 27.
En la dura travesía llovió mucho, las olas eran enormes, y al tercer día se quedaron sin agua, relataron. Interrogados sobre las motivaciones para asumir un viaje tan peligroso, uno de los cubanos admitió que querían "salir adelante".
“Por problemas económicos, queremos salir adelante, ayudar a nuestras familias y defender el derecho que tiene cada cubano de ser libre. Es peligroso, pero ser libre vale más que el riesgo que corremos”, concluyó.
Las deterioradas condiciones meteorológicas por la influencia del huracán Ian no frenaron del todo a los balseros cubanos, pues el pasado martes la Patrulla Fronteriza detuvo a otros siete migrantes que desafiaron el oleaje causado por el huracán Ian sobre el Estrecho de la Florida y tocaron tierra en Pompano Beach, en el condado de Broward.
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