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El primer ministro italiano, Mario Draghi, presentó este jueves su renuncia al cargo, pero esta fue rechazada por el presidente de la República, Sergio Mattarella, quien intenta prevenir una crisis política a pocos meses de las elecciones.
Draghi presentó su renuncia luego de que el Movimiento Cinco Estrellas (M5E), un socio decisivo de la coalición de gobierno, se abstuviera en un voto de confianza sobre un decreto clave.
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"La mayoría para la unidad nacional que había apoyado a este gobierno desde su creación dejó de existir. El pacto de confianza en el que se basa la acción de este gobierno ha desaparecido", lamentó el funcionario al hacer su anuncio.
Sin embargo, el presidente Mattarella se negó a aceptar la dimisión del ministro para evitar que se anticipen las elecciones legislativas programadas para inicios de 2023.
"No acepto la renuncia e invito al primer ministro a presentarse de nuevo ante el Parlamento", respondió a la solicitud Mattarella en un comunicado oficial.
El M5E dijo que se abstuvo de votar porque el decreto, que incluye medidas para ayudar a familias y empresas frente a la inflación, contiene un proyecto de construcción de un incinerador de basura para Roma, que sería no solo costoso, sino también contaminante, ineficiente y desfasado como tecnología.
Draghi, prestigioso economista y expresidente del Banco Central Europeo, fue invitado en febrero de 2021 por el mandatario italiano a encabezar una coalición heterogénea que reúne a la mayoría de los partidos representados en el Parlamento, con el propósito de hacer frente a la grave crisis económica y social del país.
La agencia AFP explica que el jefe de Estado se negó a aceptar en pleno verano boreal la renuncia del primer ministro porque se opone a anticipar las elecciones legislativas, programadas para inicios del 2023.
El partido antisistema, vencedor de las elecciones en 2018 con el 32% de los votos, se encuentra en plena descomposición, explicó ese medio.
Al menos 50 parlamentarios se han trasladado a otras formaciones, por lo que está tratando de captar de nuevo su electorado ante los comicios del próximo año.
Una caída del gobierno, dice AFP, provocaría mucha incertidumbre en un momento complicado debido al aumento de la inflación y a las reformas aún pendientes exigidas para el plan de recuperación financiado por la Unión Europea, que otorgó cerca de 200,000 millones de euros.
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