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Nueve empleados de la Terminal de Ómnibus de La Habana fueron sancionados, con diferentes medidas disciplinarias, por ejercer violencia machista contra una clienta, informó el Ministerio del Transporte (MITRANS).
La cubana Diana Pupo intentó viajar a Holguín, este miércoles y, al llegar a la Terminal de Ómnibus Nacionales descubrió que habían revendido su boleto; y reaccionó exigiendo explicaciones a los implicados en el fraude, que la vejaron e insultaron.
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Los trabajadores implicados no solo revendieron el boleto de la viajera , sino que cuando esta reclamó le contestaron con expresiones machistas y acosadoras, de acuerdo a la versión de una hermana de la víctima en Facebook.
Cinco empleados fueron despedidos, otro fue destinado a una plaza de menor categoría, otro fue trasladado -temporalmente- a otro puesto de trabajo y dos fueron amonestados públicamente, precisó el MITRANS.
En Cuba no existe una ley que proteja a las mujeres de la violencia machista, a pesar de que la Constitución recoge en su artículo 43 que el Estado "las protege de la violencia de género en cualquiera de sus manifestaciones".
La falta de sanciones contra acosadores y personas violentas hace que muchas mujeres sean víctimas de un trato discriminatorio y que se vulneren los derechos de un colectivo que en reiterados espacios dice sentirse desprotegido.
"Se pudo comprobar la veracidad de un conjunto de indisciplinas e incumplimientos de los procedimientos establecidos, en el actuar negligente de trabajadores pertenecientes a ambas organizaciones, tanto en La Habana como en la provincia de Holguín", dijo en un comunicado el MITRANS.
La hermana de Pupo, que hizo la denuncia en Facebook poco después del incidente, agradeció al MITRANS por su respuesta y a las personas que ayudaron a denunciar lo que sucedió.
"Se que es gracias a que nos unimos todos y todas a denunciar. Hay muchas personas que han sido violentadas y tienen miedo hablar. Pero se encontraron con la mujer equivocada", agregó.
Organizaciones y miembros de la sociedad civil independiente abogan por la adopción de leyes integrales que protejan al colectivo femenino del abuso que pudieran sufrir en determinadas situaciones como la que tuvo lugar el pasado miércoles en la Terminal de Ómnibus de La Habana.
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