Autoridades mexicanas abrieron una investigación para determinar responsabilidades sobre el uso de descargas eléctricas con una pistola taser por parte de agentes de migración en el estado de Chiapas, durante un intento de detención a un inmigrante cubano el pasado 28 de marzo.
El uso de pistolas taser es un equipamiento que no contempla el Instituto Nacional de Migracion (INM) en su protocolo de actuación, lo que ha motivado la apertura de un expediente de control interno.
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Circula en redes sociales un vídeo que muestra el momento en que cuatro agentes de migración, tres hombres y una mujer, forcejearon con la víctima -que se resistía al arresto- hasta que uno de los agentes presuntamente aplicó descargas eléctricas.
Durante el incidente los agentes que participaron de la acción fueron increpados por varios pobladores del lugar, que llegaron a calificar lo sucedido de "abuso de autoridad". En las imágenes se pueden escuchar, además, los gritos del cubano pidiendo "ayuda".
El Instituto Nacional de Migración (INM), dependiente de la Secretaría de Gobernación, informó este martes en un comunicado que inició las investigaciones para deslindar responsabilidades, y que dio vista al Órgano Interno de Control (OIC) "respecto a la actuación de los agentes de migración".
El INM aclaró "que no tiene entre su equipamiento o herramientas de trabajo ni en su protocolo de actuación, el uso de aparatos de descarga eléctrica, como el que aparentemente fue utilizado por personas servidoras públicas de la institución en contra de la persona en contexto de movilidad".
Condenó y lamentó "todo acto contrario a la ley", sobre todo si este lo realiza o es cometido por una autoridad.
“El INM no tolera actos que contravengan la ley, el respeto y la salvaguarda de los derechos de las personas migrantes, por lo que estará atento a la resolución que emita el OIC sobre el particular”, concluye la nota oficial sobre lo el hecho, ocurrido en la comunidad de Ciudad Hidalgo, perteneciente al municipio de Suchiate en el estado de Chiapas, sureste de México.
El director del Centro de Dignificación Humana en Tapachula, Luis Rey García Villagrán, indicó -en declaraciones recogidas por la agencia EFE- que en caso de que el migrante estuviera alterando el orden, como pateando algún portón o que hubiese robado, el INM "no es autoridad competente para eso, por lo que el extranjero debió haberse puesto a disposición de la autoridad competente porque esas detenciones fomentan la violencia y el odio".
Lamentó que algunos ciudadanos celebraran que el personal de migración lo sometiera con descargas eléctricas, y subrayó que también se pudo ver la sensibilidad de algunas personas que defendieron al migrante.
Medios noticiosos indican que se desconoce el paradero del inmigrante cubano y que no existen reportes de que esté en la estación migratoria Siglo XXI ni en las oficinas de la Fiscalía General de la República (FGR).
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