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Más de 1,700 derrumbes continúan sin solución en Ciego de Ávila desde 2017

Un total de 501 viviendas están en fase de terminación, mientras que la cifra de hogares que aún no son reparados asciende a 508 y el resto de las casas quedaron paralizadas en las etapas de cimentación y estructura.

Construcción de viviendas en Ciego de Ávila © Alejandro García Sánchez/ Invasor
Construcción de viviendas en Ciego de Ávila Foto © Alejandro García Sánchez/ Invasor

Este artículo es de hace 2 años

Más de 1,700 derrumbes totales, ocasionados tras el paso del huracán Irma por Ciego de Ávila en 2017, continúan sin solución, luego de que la provincia solo cumpliera el 35% de sus planes constructivos el pasado año.

El periódico oficialista Invasor reconoció los atrasos en la reedificación de los inmuebles dañados por el potente fenómeno meteorológico que afectó al país hace casi cinco años. Asimismo afirmó que el punto más complicado de la geografía avileña es la localidad de Punta Alegre.

Leiter Méndez Valdivia, subdirector general de la Dirección Provincial de la Vivienda, dijo al medio de prensa local que un total de 501 viviendas están en fase de terminación, mientras que la cifra de hogares que aún no son reparados asciende a 508 y el resto de las casas quedaron paralizadas en las etapas de cimentación y estructura.

Estos datos incluyen las tres modalidades que emplea el estado cubano: vía estatal, esfuerzo propio y subsidios. Durante enero, apenas se terminaron 56 casas de las 146 previstas.

Dentro de las principales causas para este atraso y el reiterado incumplimiento, las autoridades de Comercio en el territorio, admitieron que en el caso de los subsidios, que representan el 43% de lo que pretenden construir en 2022, no resultan rentables por la falta de materiales en las instalaciones estatales.

Según Diamelys Sánchez Viera, directora del Grupo Empresarial de Comercio, tuvieron que paralizar la venta de cemento a granel y de áridos porque daba pérdidas. Por cada metro cúbico de arena artificial se reportaron mermas de 122 pesos cubanos.

Foto: Invasor

“Cuando tú le sumas, al costo de producción, el costo de la transportación, se te va por encima del precio al que tenemos establecido vender, y que es por el cual se aprobó el monto actual del subsidio”, explicó Sánchez Viera quien agregó además que el valor de los materiales, particularmente los producidos nacionalmente, son definidos de forma centralizada, sin atender a las particularidades de cada provincia.

De igual manera explicó que con anterioridad, las diferencias entre los precios de producción y los de subsidios eran asumidas por el gobierno, sin embargo, ahora mismo no han determinado de qué manera cubrir los gastos. La indicación que recibieron estos directivos provinciales fue de que comenzaran a vender y anotaran en un libro las pérdidas, hasta ver…

Méndez Valdivia afirmó que este programa es uno de los más afectados y que “el año pasado, prácticamente, ni se aprobaron nuevos subsidios, pues el cúmulo que tenemos de otros años es grande y la idea es ir saldando esas deudas”.

Destacó que otra tarea priorizada por el estado con pocos avances es el de las viviendas para madres con tres hijos o más. En el último trimestre de 2021 entregaron 85 casas y en cuanto al año en curso, el financiamiento con que cuentan (casi cinco millones de pesos) solo permitirá edificar 16 hogares.

Señaló, sin embargo, que estos números son mejores que los registrados de 2012 a 2020. En esos ocho años construyeron en Ciego de Ávila apenas 76 inmuebles.

La situación habitacional en Cuba es extendida a otras provincias que también presentan atrasos e incumplimientos, de manera marcada durante 2021. En Sancti Spíritus, por ejemplo, dejaron de entregarse 1,141 obras previstas para el año anterior, como consecuencia de los bajos niveles de terminación del plan estatal que solo llegó hasta el 55%.

Funcionarios del sector en esa localidad, reconocieron que las principales dificultades radicaron en el ínfimo fondo de ejecución durante los primeros meses y la falta de recursos materiales, como cemento, acero, elementos de fijación y para las cubiertas ligeras, electrodos y cables eléctricos de diferentes calibres.

De manera general, el gobierno cubano admitió a inicios de 2022, que quedaron pendientes 89,496 viviendas con pisos de tierra, una cifra que aunque es inferior a la de hace dos años, continúa siendo elevada. Asimismo reconocieron que en la isla existen 8,907 cuarterías y 48,293 hogares afectados por eventos climatológicos ( el 66% de estas edificaciones sufrieron derrumbes totales), según datos oficiales.

Vivian Rodríguez Salazar, directora nacional de la Vivienda, dijo en una reunión con los gobernadores e intendentes del país que el Plan de la Economía para el año en curso prevé la construcción de unas 38,000 viviendas, números que no cubren la demanda de necesidades de la población.

El plan gubernamental para atender las dificultades con el fondo habitacional fue ejecutado en un 42%. Las provincias con peores resultados fueron Camagüey, Holguín, Santiago de Cuba, Granma, Guantánamo, Villa Clara y Ciego de Ávila. Solo en Cienfuegos se registró un desempeño del 100%, mientras que en La Habana, la provincia con mayor densidad poblacional del país, la ejecución llegó hasta el 59%.

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