En Baracoa, la Villa Primada, hay una crítica situación con los salideros de agua potable y albañales por la falta de recursos y accesorios y, por tanto, es preferible derrochar el vital líquido antes que darle una solución definitiva al problema.
Darío Paulino Navarro, director de la empresa de Acueducto y Alcantarillado de esa ciudad guantanamera, ratificó a la prensa oficial el déficit que existe en el territorio para hacer frente a la crisis, algo que hizo público en noviembre el máximo dirigente de la entidad.
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"Los salideros son por diferentes desperfectos de los accesorios, por roturas en las conductoras. Es preferible dejarle esa acometida a los clientes que reciben el agua, aunque se esté botando un poquito en la calle", dijo Navarro.
El funcionario no especificó cuántos salideros tienen identificados en la empresa, solo que trabajan con algunos recursos en la reparación de aquellos que generan más pérdidas de agua potable y por ende la rotura de la vía pública.
El periodista culpó al "bloqueo" (eufemismo para referirse al embargo estadounidense) de la incapacidad para dar respuesta a la necesidad de reparar los salideros en Baracoa, sin especificar de qué manera las sanciones económicas de ese país impiden a la entidad estatal adquirir piezas y recursos en otros mercados internacionales.
Asimismo, se reconoció que los salideros de albañales es un "problema por resolver" en la Villa Primada, donde las calles se inundan con aguas negras, foco de enfermedades y contaminación.
Lo que la prensa oficial calificó de "lunares oscuros" es un problema que se extiende por todo el país, donde se registran más de 6,800 salideros, reflejo de la incapacidad administrativa para enfrentar las crisis que genera el propio sistema político cubano.
Los vecinos de Santiago de Cuba crearon un grupo en Facebook para denunciar el estado en que se encuentran las calles de la segunda ciudad en importancia de la isla, debido a la presencia de salideros de agua potable y albañales.
Los miembros del grupo virtual denuncian que durante años se vierte agua en las diferentes barriadas de Santiago sin que el gobierno local tome una medida concreta para revertir el problema.
La Habana es otra de las ciudades con mayores afectaciones en este tema, donde las entidades estatales tienen localizados hasta 3.500 salideros, más de tres veces de lo que existió en años anteriores.
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