El régimen cubano inauguró este jueves en La Habana el Centro Fidel Castro Ruz, al cumplirse cinco años del fallecimiento del político que se perpetuó en el poder en Cuba por más de medio siglo.
La nueva institución fue autorizada con carácter excepcional por la Ley 123 de la Asamblea Nacional del Poder Popular de 2016 “Sobre el uso del nombre y la figura del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz”, aun cuando este había expresado el deseo de que su nombre no figurara en nada después de su muerte.
No obstante, se legisló la creación de esta institución, con la manifiesta intención de promover el estudio y difusión de su pensamiento y obra.
Según una nota publicada por el diario oficialista Granma, el centro se erigió en el Vedado, tras la restauración de una de sus mansiones más lujosas que abarca toda una manzana en las intersecciones de las calles Paseo y 11.
Las obras se llevaron a cabo aún en medio de la crisis que enfrenta el país en materia de vivienda y en general.
A principios de año, un grupo de Facebook compartió imágenes de cómo había quedado la restauración del inmueble que ocuparía el Centro Fidel Castro Ruz y los usuarios no dejaron pasar la oportunidad para inundar de comentarios la publicación en la red social.
En esa ocasión un internauta consideró que el centro sería “para hacerle culto a su personalidad!!! Y mantener vivo el legado del hambre”.
“¿No era que nada podía llevar su nombre?”, cuestionó otra usuaria, en referencia a la supuesta última voluntad de Castro de no usar su nombre en obras o lugares públicos después de fallecido.
En otros comentarios dijeron: “¡Qué repulsión!”, “Cuánto despilfarro en medio de una pandemia mundial y un país sumido en una crisis económica sin precedentes, no tienen vergüenza”.
La restauración del inmueble conllevó al menos dos años de trabajo y, según Alberto Alvariño, jefe de la Oficina de Preservación del Patrimonio Documental, el centro de estudios tendrá un carácter político, público, además de estar equipado con alta tecnología para que estimule la información interactiva con énfasis en los niños adolescentes y jóvenes.
La edificación que ahora ocupa el Centro Fidel Castro Ruz perteneció a Lila Hidalgo-Gato, una de las mayores benefactoras de la sociedad republicana. La familia Hidalgo-Gato fue propietaria, entre otros bienes, del hospital de Rancho Boyeros.
Después de 1959, esa mansión pasó a ser parte del Ministerio del Interior, que la utilizó como un centro de atención a menores con problemas de conducta.
Las labores de restauración se extendieron hacia las calles y aceras aledañas, que fueron reparadas. A su alrededor se instaló una reja perimetral de 400 metros de largo, y se adoquinó la calle frontal tal como era originalmente.
Este centro podría estar dirigido por Lázaro Expósito Canto, tras ser liberado como primer secretario del Partido en la provincia de Santiago de Cuba, según sugirió el gobernante Miguel Díaz-Canel.
En un homenaje oficial por su labor en el PCC, el mandatario afirmó que "Lázaro no se despide para nada, va a asumir tareas en la dirección de importantes proyectos vinculados a la vida y obra del Comandante en Jefe Fidel Castro Ruz, y de hecho vinculados a la historia de la Revolución en las provincias orientales, a las que ya ha dedicado gran parte de su tiempo, con indicaciones precisas del General de Ejército Raúl Castro Ruz, y por lo tanto continuará aquí, participando".
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