El canciller cubano Bruno Rodríguez Parrilla acusó de racista al expresidente español José María Aznar, aunque calla cuando ofenden a los negros cubanos.
“Es deplorable la burla racista de José María Aznar y de quienes lo aplaudieron en la Convención del PP; evidencia de la apología de los crímenes de la conquista, la esclavitud, el exterminio, y de su pensamiento supremacista. Intolerable ofensa hacia Nuestra América”, expuso este viernes el ministro de Relaciones Exteriores en su cuenta de Twitter.
El señalamiento de Rodríguez Parrilla surgió tras los pronunciamientos de Aznar en la reciente Conferencia del PP, camino a la Convención Nacional de este fin de semana en Valencia, España.
El expresidente español en su intervención dijo que “en esta época en la que se pide perdón por todo, yo no voy a engrosar las filas de los que piden perdón".
"Por defender la historia de España con sus claros y sus oscuros estoy dispuesto a sentirme orgulloso y no voy a pedir perdón", aseguró Aznar en su participación en la citada conferencia, que reseña el diario El Confidencial.
No obstante, mientras el ministro cubano cuestiona públicamente al exmandatario español “por su deplorable burla racista”, se hace notar la ausencia de igual postura cuando se trata del tema racial en la isla.
Tras las jornadas de protestas del 11J, trascendió una declaración conjunta de varios centros de investigaciones de la Universidad de Harvard, en Estados Unidos, que condenaba la represión del gobierno cubano contra artistas y activistas de la isla, subrayando la postura en el caso de los afrodescendientes.
La declaración del Centro David Rockefeller de Estudios Latinoamericanos, el Centro Hutchins de Investigaciones Africanas y Afroamericanas y el Instituto de Investigaciones Afrolatinoamericanas de la Universidad de Harvard, abundó sobre la vulneración de los derechos humanos en Cuba.
Los centros de la universidad estadounidense recalcaron que los reprimidos son jóvenes afrodescendientes, como los raperos Denis Solís González, Maykel “Osorbo” Castillo y Eliecer Márquez Duany “El Funky”, actualmente presos o detenidos bajo dudosos cargos de “desacato” o “desobediencia”.
“San Isidro es un barrio pobre habitado mayoritariamente por afrodescendientes. La naturaleza, calidad e intensidad de la violencia estatal desatada contra sus residentes se asemeja a formas de violencia estatal racializada en otros países de América, incluido Estados Unidos, que también hemos denunciado enérgicamente desde nuestras plataformas. Las vidas de los negros cubanos también importan”, añadieron en su comunicado, sobre el cual el canciller cubano no hizo pronunciamiento alguno, entre tantos ejemplos más de hacer oídos sordos al tema racial en Cuba.
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