Berta Soler, líder de las Damas de Blanco, exigió al régimen cubano este lunes “fe de vida” de los opositores José Daniel Ferrer y Félix Navarro Rodríguez, presos desde las protestas del 11 de julio.
Soler pidió que el régimen aporte evidencias sobre el estado de salud de Navarro, quien es líder del Partido por la Democracia "Pedro Luis Boitel", y de José Daniel Ferrer, máxima autoridad de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU), la organización opositora con mayor cantidad de afiliados en la isla.
La activista por los derechos humanos y la liberación de presos políticos precisó que Navarro, que permanecía delicado de salud por secuelas del COVID-19 que cogió en la prisión del Combinado del Sur, en Matanzas, estaría “plantado” en huelga de hambre desde el 23 de agosto.
La última vez que el opositor se comunicó con su familia fue el pasado 17 de agosto, cuando les comunicó que se plantaría el 23. “Aún no se sabe nada de Navarro, los represores son responsables de su integridad física”, concluyó Soler.
En lo que respecta a José Daniel Ferrer, Berta Soler dijo que continúa “desaparecido” y que el opositor “le dijo a su esposa que si lo detenían [el 11 de julio], se plantaría”. Desde ese día Ferrer no se ha comunicado con su familia ni una sola vez.
La Dama de Blanco hace responsable de la integridad física de los dos opositores al régimen de Miguel Díaz-Canel.
Ambos líderes integran el Consejo para la Transición Democrática en Cuba (CTDC), Ferrer en calidad de Presidente y Navarro ocupa una de las vicepresidencias.
Miembros del Consejo para la Transición Democrática en Cuba, que agrupa a opositores de varias organizaciones, iniciarán esta semana un ayuno para protestar contra la detención de manifestantes tras las protestas del 11J.
“Un número de activistas y líderes integrantes del CTDC comenzarán un ayuno todos los jueves, a empezar por el próximo jueves 2 de septiembre, entre 8 am y 8 pm. Un llamado de atención colectivo para continuar sensibilizando a la sociedad cubana y al mundo, por la causa de todos los presos políticos en Cuba”, informó la organización en un comunicado.
Tanto Ferrer como Navarro forman parte del “grupo de los 75” condenados en el 2003 durante la ola represiva conocida como “Primavera Negra” y liberados entre 2010 y 2011 con una licencia extrapenal tras un diálogo en el que mediaron la Iglesia católica y el Gobierno español.
En el caso de Ferrer, el líder de la Unión Patriótica de Cuba (UNPACU) fue detenido el 1 de octubre de 2019 y condenado a prisión en febrero de 2020 tras un juicio a puerta cerrada por un supuesto delito de lesiones a otro hombre, cargo que sus familiares y colaboradores niegan.
Tras seis meses encerrado y en medio de fuertes presiones internacionales, en abril de 2020 le conmutaron la pena por una sanción de cuatro años y medio de detención domiciliaria. El 17 de agosto, sus allegados publicaron un texto del Tribunal Provincial Popular de Santiago de Cuba con fecha del 12 de agosto donde el juez revoca el arresto domiciliario del líder opositor y ordena su ingreso en prisión para que cumpla allí los 4 años y 14 días que le restaban de condena.
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