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Ante la incertidumbre y la solidaridad despertada por la alarmante situación epidemiológica provocada por el coronavirus, el hashtag #SOSCuba se convirtió este sábado en tendencia en la red social Twitter con más de 362 mil tuits que utilizaron esta etiqueta solo en Estados Unidos.
Utilizada por miles de cubanos dentro y fuera de Cuba, en las últimas horas son varias las personalidades y artistas extranjeros que se han sumado al grito para exigir al gobierno la apertura de un corredor humanitario gestionado por actores de la sociedad civil que canalice la ayuda solidaria.
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A pesar de encontrarse ante un alarmante pico de contagios, las autoridades cubanas no aventuran pronósticos de evolución de la situación, pero lanzan constantemente el mensaje de confianza en su gestión y de tener controlada la situación.
Al mismo tiempo, han intentado desacreditar el mensaje de la sociedad civil independiente que reclama atención y solidaridad para los cubanos, entrampados mortalmente por la pandemia, la escasez de medicinas y alimentos, y la incompetencia de un gobierno más preocupado por reprimir a la disidencia que aliviar las penas de los cubanos.
Este viernes, Cuba alcanzó un nuevo récord de contagios y fallecimientos por noveno día consecutivo, con 6,750 nuevos casos positivos detectados y 31 muertes a causa del coronavirus. El saldo supera el record del día anterior en 328 nuevos contagios y tres fallecidos de más en comparación con las cifras reportadas este jueves.
A la espera de conocer las cifras del reporte del ministerio de Salud Pública (MINSAP) correspondientes al sábado, la evolución de la curva en las últimas semanas confirma la magnitud de la alarma sanitaria que vive la isla.
En redes sociales son incontables los testimonios de cubanos que reportan fallecimientos de familiares y vecinos por COVID-19, desatención de personas enfermas, falta de recursos en hospitales y policlínicos, fallos en los servicios de emergencias y ambulancias, saturación de las capacidades hospitalarias y otros problemas que informan de la situación de colapso en la sanidad pública cubana.
Muchas de estas denuncias utilizan el hashtag #SOSCuba, al igual que otras tantas que exponen los problemas que existen con el aumento de las personas fallecidas, algunas de las cuales quedan durante horas en sus domicilios, sin ser recogidas por los servicios médicos o mortuorios pertinentes. Al colapso hospitalario, se añade ahora un principio de colapso de los servicios funerarios, con déficit de ataúdes y saturación en los cementerios.
Lejos de afrontar esta realidad y reconocer el descontrol de la situación, las autoridades cubanas están empeñadas en hacerla parecer como el resultado de las exageraciones y la mala voluntad de “contrarrevolucionarios” que pretenden crear alarma y provocar protestas y revueltas entre la población.
Al mismo tiempo, y ante el creciente interés de la opinión pública por la información que circula bajo el hashtag de #SOSCuba, los gobernantes cubanos se han dado prisa en dar instrucciones a sus funcionarios para no replicar la etiqueta y divulgar el mensaje de que las autoridades cubanas sí aceptan ayuda humanitaria, siempre que sea por los “canales correspondientes”.
La etiqueta que ahora se ha vuelto tendencia en Twitter se conoció a finales de abril, pero bajo una perspectiva diferente a la actual. En aquellos días, varios activistas de la sociedad civil independiente adoptaron la etiqueta #SOSCuba como un grito de auxilio en solidaridad con los cubanos sitiados en su domicilio por la policía política y de rechazo ante el incremento de la represión.
"Necesitamos que sea un llamado internacional de auxilio y solidaridad", subrayó el rapero Maykel “Osorbo” Castillo, uno de los primeros en lanzar la iniciativa, quien pidió a todos los cubanos, dentro y fuera del país, que postearan una fotografía con la etiqueta #SOSCuba.
A los pocos días de lanzada la iniciativa, exiliados cubanos se reunieron en el Freedom Tower de Miami para realizar una manifestación como parte de la campaña #SOSCuba, reclamando auxilio y solidaridad con los activistas que actualmente se encuentran siendo reprimidos en la isla. Desde entonces, han sido varias las manifestaciones convocadas por los exiliados cubanos bajo esta etiqueta.
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