Estados Unidos señaló este jueves a Cuba entre los países que no cooperan en la eliminación del tráfico de personas y reclamó que los médicos enviados a misiones en el exterior reciban salarios justos y sin el control impuesto sobre ellos por el régimen cubano.
El informe sobre trata de personas de 2021, presentado este jueves por el Departamento de Estado, indica que el gobierno cubano "no cumple con los requerimientos mínimos para combatir la trata de personas y no está haciendo esfuerzos notables" para eliminar esa forma moderna de esclavitud laboral, expresada a través de sus programas de colaboración internacional en materia de salud.
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"El gobierno cubano se ha beneficiado monetariamente de misiones médicas en el extranjero enviando su persona médico al extranjero, sin informarles de los términos de sus contratos, confiscando sus documentos y bajo amenazas a sus familiares si tratan de escapar de la misión”, dijo el Secretario de Estado, Antony Blinken al presentar el reporte anual en conferencia de prensa en Washington.
Cuba aparece en el nivel 3 de incumplimiento en materia de trata de personas, una designación que se ha mantenido por los últimos tres años con insistencia en las arbitrariedades cometidas respecto a las misiones médicas cubanas en el extranjero.
"Durante 2020 el gobierno cubano sacó provecho de la pandemia aumentando el número y el tamaño de las misiones médicas y se negó a mejorar la transparencia del programa o a abordar las violaciones laborales y los delitos de trata de personas, a pesar de las persistentes denuncias de observadores, exparticipantes y gobiernos extranjeros sobre la participación de funcionarios cubanos en los abusos", indicó el reporte.
Entre las recomendaciones hechas en el documento, se insta a garantizar que las misiones médicas en el extranjero cumplan con las normas laborales internacionales como condición para mantenerse en vigor, y garanticen que sus participantes reciban salarios justos, pagados en su totalidad en cuentas bancarias que puedan controlar personalmente, manteniendo el control de sus pasaportes, contratos y credenciales académicas.
El informe pide además "garantizar un entorno de trabajo a salvo de la violencia, el acoso y la vigilancia intrusiva" y que los profesionales cubanos puedan tener libertad de movimiento para considerar el abandono del programa o el rechazo de una asignación sin sanciones como la amenaza, el encarcelamiento o la prohibición de regresar a Cuba.
El gobierno cubano reaccionó de inmediato a la divulgación del informe y calificó las declaraciones de Blinken de deshonestas y ofensivas para el personal médico cubano.
"Repiten sin pudor las mentiras fabricadas durante el gobierno de Trump para justificar la agresión. Muestra de la corrupción política", dijo el canciller Bruno Rodríguez Parrilla en Twitter.
El informe fue presentado por Blinken junto a Kari Johnstone, directora interina de la Oficina para Monitorear y Combatir la Trata de Personas en el Departamento de Estado, y detalla por región los países más afectados por el tráfico humano y los gobiernos cuya política estimula o genera directamente esta práctica de esclavitud moderna.
“El Informe sobre la trata de personas de 2021 incluye los siguientes 11 gobiernos con una "política o patrón" documentado de trata de personas, trata en programas financiados por el gobierno, trabajo forzoso en servicios médicos afiliados al gobierno u otros sectores, esclavitud sexual en campamentos gubernamentales o empleo o reclutamiento de niños soldados”, resaltó el informe y enumeró países como Birmania, Afganistán, Corea del Norte, Rusia y Cuba.
Según aclara el documento, el gobierno cubano no informó haber realizado esfuerzos para combatir esta forma de la trata en el último año.
“Los funcionarios gubernamentales del Ministerio de Justicia continuaron siendo cómplices de los esquemas estatales de exportación de mano de obra al enjuiciar a las personas que abandonaron las misiones internacionales de Cuba debido a abusos dentro de los programas”.
María Werlau, fundadora y directora ejecutiva de los proyectos Archivo Cuba y Cuba Salud, dijo a CiberCuba que el informe es un gran paso en la defensa de los derechos humanos en la isla.
“Los comentarios de Blinken indican que al fin han tomado en serio el punto que venimos defendiendo hace tiempo: que las misiones médicas son un negocio de tráfico de personas del mismo gobierno, algo muy inusual", señaló Werlau, quien ha documentado durante años las violaciones en los programas de colaboradores cubanos enviados al exterior.
La académica y activista consideró que el reporte de este año es el más completo que ha realizado el Departamento de Estado sobre la explotación de las misiones médicas cubanas, señalando también a muchos de los países adonde son enviados los profesionales de la isla.
"Es un avance muy positivo y creo que ahora debe lograrse que se recoja y denuncie el tráfico de otros trabajadores cubanos igualmente explotados por vía de los programas de colaboración en el exterior", comentó Werlau.
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