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Líderes cubanoamericanos se unieron este miércoles una petición bipartidista al presidente Joe Biden para que su Administración no suavice la política ni abra negociaciones con Cuba mientras que no se produzcan avances democráticos en la isla.
El senador demócrata Bob Menéndez, actualmente el político cubanoamericano de más alto rango en Washington, y los republicanos Marco Rubio y Rick Scott, además de los congresistas Carlos Giménez, Mario Díaz Balart y María Elvira Salazar y los alcaldes de Miami, Hialeah, Coral Gables y Doral, solicitaron a Biden mantener la política de sanciones contra La Habana y exigir el cese de las violaciones de derechos humanos en la Isla.
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Menéndez, nuevo presidente del Comité de Relaciones Exteriores del Senado, subrayó que el gobierno cubano “ha encontrado nuevas herramientas para socavar los valores democráticos” y recordó que, en los dos últimos años, ha promulgado los decretos 349 y 370 que “restringen aún más la libertad de expresión y de prensa en Cuba”.
“Mientras Estados Unidos se esfuerza por fortalecer el respeto por la democracia y los derechos humanos en Cuba y en todo el mundo, debemos asegurarnos de que nuestros esfuerzos produzcan resultados tangibles en estos temas fundamentales”, dijo Menéndez, quien señaló haber transmitido sus puntos de vista a Biden, su ex colega de bancada en el Senado.
También destacó la “valentía” de artistas y activistas en referencia al Movimiento San Isidro y señaló que las protestas demuestran que el pueblo cubano “quiere vivir en una sociedad basada en la tolerancia, la libre expresión y la democracia”.
Menéndez envió su mensaje a través de un video durante una conferencia de prensa en el Museo la Diáspora Cubana, con sede en Miami, donde también comparecieron representantes de organizaciones del exilio y hablaron varias figuras del movimiento opositor desde la isla.
La totalidad de los participantes en el evento, auspiciado por la fundación Inspire America, coincidieron en la necesidad de sostener la línea dura de la administración de Donald Trump, la cual, a su juicio, tuvieron efecto al poner “a la dictadura contra las cuerdas”.
“Bajo la nueva Administración Biden tenemos que estar unidos para resaltar y dejar claro que la política de Estados Unidos hacia Cuba no es solo un tema que afecta a Florida”, expuso Marco Rubio, quien integra el Comité de Inteligencia del Senado.
Para Rubio, las relaciones entre ambos países tienen repercusiones en temas de seguridad nacional y “el futuro de nuestra región”. “Bajo la Administración Trump, logramos muchos avances para poder responsabilizar a la dictadura criminal de los Castro. Es importante que dejemos claro que cualquier acercamiento al régimen no cambiará nada el futuro de los cubanos”.
El senador republicano por Florida resaltó que el gobierno de Miguel Díaz-Canel, a quien llamó "un títere de Raúl Castro", tiene vínculos con grupos terroristas "como las FARC, el ELN y el narcorégimen de Maduro” en Venezuela, dijo en un video enviado desde Washington.
El congresista Carlos Giménez, exalcalde de Miami-Dade, expuso que antes de modificar la política de mano dura de Estados Unidos con Cuba, el régimen debía liberar a todos los presos políticos, restablecer los derechos civiles para “todos los cubanos” y celebrar finalmente elecciones libres y democráticas.
“Los oficiales electos en esta comunidad tenemos diferencias, pero si algo nos une es pedir la libertad de Cuba”, aseguró Giménez.
María Elvira Salazar, también congresista republicana, envió un mensaje al grupo a través de un video, uniéndose a la petición de los demás políticos de que "no es el momento para levantar sanciones al régimen cubano".
"Esta es la causa más noble de todas las causas y la asignatura pendiente en nuestro hemisferio: la libertad de Cuba", declaró Salazar.
La petición de este miércoles se produce apenas un día después de que empresarios y jóvenes cubanoamericanos divulgaran un documento solicitando a Biden buscar un acercamiento con Cuba que permita empoderar la sociedad civil, y promover una mayor libertad y un futuro más próspero para el pueblo de la isla. Otras recomendaciones favorables a normalizar las fracturadas relaciones con La Habana han sido enviadas a la Casa Blanca a través de cartas públicas, o la propuesta de la no gubernamental Oficina de Washington para América Latina (WOLA).
El abogado Marcell Felipe, presidente de la Fundación Inspire America, agradeció que Biden trasmitiera a los estadounidenses de origen cubano la voluntad de contar con ellos a la hora de decidir qué política aplicar al gobierno castrista. La Fundación Inspire America es una organización sin fines de lucro cuyo propósito es “promover” un cambio de régimen en Cuba.
La solicitud incluye el reclamo de no sacar a Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo y renovar el apoyo a la oposición en la isla.
Durante el intercambio se elogió repetidamente la política de la administración Trump, que, según el alcalde de la ciudad de Miami, Francis Suárez, "tuvo resultados notables".
De momento, no está claro si Biden desmantelará completamente la política anterior para fomentar un nuevo “deshielo” en las relaciones como continuidad de la Administración de Barack Obama, aunque el actual mandatario prometió eliminar los límites a las remesas y restricciones de viajes.
Hasta el momento, altos representantes del gobierno de Biden han insistido en que la política hacia Cuba está sometida a una amplia revisión".
Durante el encuentro, se trasmitió también un video enviado por el opositor y líder de la Unión Patriótica de Cuba, José Daniel Ferrer, pidiendo a la administración que “no haga concesiones a la tiranía que oxigenen a esta férrea dictadura”.
Los alcaldes Carlos Hernández (Hialeah), Raúl Valdés-Fauli (Coral Gables) y Juan Carlos Bermudez (Doral), y el comisionado de Miami, Joe Carollo, asistieron al encuentro, así como representantes de organizaciones como la Asociación de Veteranos de Bahía de Cochinos-Brigada 2506, MAR por Cuba, Plantados y Directorio Democrático Cubano.
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