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Susan Rice y Jake Sullivan, asesores de política y seguridad nacional del equipo del presidente electo Joe Biden, convinieron en que “este no es el momento de venir a Estados Unidos”.
En declaraciones a la agencia de noticias EFE, Rice y Sullivan se pronunciaron sobre los planes migratorios de la nueva administración de cara a la crisis existente en la frontera con México.
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Ambos intentaron contener el "efecto llamada" que la toma de posesión de Biden puede generar entre los migrantes. Sobre todo, después de cuatro años en que el derecho a asilo fuera restringido bajo el gobierno de Donald Trump, y tras el paso de los devastadores huracanes Eta e Iota por Centroamérica.
Como medidas sanitarias contra la pandemia, los CDC (Centros de Control y Prevención de Enfermedades) emitieron una orden mediante la cual EE.UU. envía a México, actualmente, a más del 90% de los que cruzan ilegalmente la frontera.
Ante la expectativa de cómo actuará la administración de Biden, Rice declaró: “El presidente electo está comprometido a restaurar y respetar nuestras leyes de asilo, incluso en la frontera, y muchas de las políticas de la administración saliente se revertirán de inmediato. Otras tomarán tiempo para implementarse, y la situación en la frontera no se transformará de la noche a la mañana”.
La funcionaria calificó la infraestructura legada por la actual administración como ineficaz, y añadió que restaurar la capacidad de procesamiento es un gran desafío. “Estamos heredando una infraestructura profundamente dañada”, comentó Rice.
Jake Sullivan, por su parte, aseguró que “el presidente electo Biden cumplirá su compromiso de poner fin al programa de Protocolos de Protección a Migrantes (MPP, en inglés, también conocido como "Permanezcan en México") al principio de su administración”.
“El MPP ha sido un desastre desde el comienzo y ha provocado una crisis humanitaria en el norte de México”, dijo.
Recordemos que “Permanezcan en México” ha enviado a más de 60.000 indocumentados que cruzaron la frontera a esperar en México sus citas ante jueces migratorios de EE.UU.
Sullivan aclaró que se priorizarán los casos de asilo que se inscribieron en el programa. Además, se ejecutará el proceso de una manera justa, segura y ordenada.
Aunque el presidente Biden está comprometido con mejorar la situación en Centroamérica a través de ayudas a los afectados por el paso de dos huracanes, y establecer nuevos programas para que los migrantes no arriesguen sus vidas en manos de contrabandistas, “este no es el momento de venir a Estados Unidos”, advirtió el asesor de Seguridad Nacional.
“Dada la pandemia y la gran cantidad de migrantes que ya esperan en el norte de México, ahora no es el momento de emprender el peligroso viaje a Estados Unidos. Pasarán meses hasta que podamos implementar completamente nuestros planes”, dijo Sullivan.
Ante la pregunta de cuán prioritario era el tema migratorio para el presidente electo, Rice respondió: “Biden se enfrentará a muchos asuntos críticos cuando asuma el cargo. Pero abordar nuestro sistema de inmigración disfuncional es una de sus principales prioridades. El presidente electo cumplirá con su compromiso de enviar un proyecto de ley al Congreso inmediatamente después de asumir el cargo. La administración Biden no podrá arreglar todo por su cuenta, necesitamos cambios legislativos”.
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