El basquetbolista cubano Reynaldo García, quien juega actualmente para la Liga Nacional de Baloncesto Profesional de México, expresó los deseos de regresar a jugar con la selección de su isla natal.
“Volver a jugar con mi país sería lo más grande”, dijo en una entrevista con el medio deportivo Play Off.
En este sentido, informó que José Ramírez, director de la Selección Nacional, se comunicó con él y sus familiares para plantearle la posibilidad, pero aún no hay nada concreto al respecto.
García sospecha que la dilación de una respuesta se debe a trabas burocráticas, como el tema de la repatriación.
Aseguró que los directivos se ofrecieron para ayudarlo a agilizar trámites, pero todo se complica porque él pasa largo tiempo fuera de la isla cumpliendo sus contratos profesionales.
Con anterioridad, García integró el equipo Capitalinos en la Liga Superior de Baloncesto en Cuba. Ahora reúne experiencias de competiciones en varios países.
Inconforme con un clima de violencia y otras dificultades en la liga cubana, optó por abandonar su país e irse a probar suerte a Ecuador, con solo 19 años de edad. Fue una decisión difícil —explica— ya que poco antes había sido convocado para la preselección nacional con vistas a una gira que se iba a realizar por España.
Corría el año 2009 cuando llegó a la ciudad de Quito, donde rápidamente comenzaría a jugar baloncesto, mientras incorporaba el choque cultural a su vida, una nueva ciudad que se alzaba ante él y personas con un carácter distinto al acostumbrado en la isla.
Según García, el proceso de adaptación le resultó muy complicado, pero tenía su mente enfocada en salir adelante con el deporte que amaba. De cualquier modo, pensaba que su estadía en Ecuador sería parte de un tránsito dentro de su carrera deportiva.
En efecto, luego vendría una estancia en México y otra por Argentina. El país austral, según sus palabras, fue una verdadera escuela en el aprendizaje del básquet. Allí aprendió a desarrollar un juego “más táctico y estudiado”.
Más adelante, volvería a suelo azteca para competir con los Leñadores de Durango, de la Zona Este. Su promedio de 17.8 cartones por partido, 5.6 rebotes y 6.1 asistencias, le valieron para ser nominado al MVP de la Liga Nacional de Baloncesto Profesional de México, título que finalmente no obtendría por una diferencia de votos populares.
Sin embargo, según el portal Play Off, muchos son los que desean verlo de nuevo en las canchas vistiendo la camiseta de su país, Cuba, y acompañando a otros exponentes como Javier Justiz.
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