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El cubano Erick Hernández rompió su propio récord mundial en el dominio del balón. Durante 65 minutos y 34 segundos, el deportista conocido como Domador demostró su capacidad para evitar que la esférica cayera al piso.
En un reporte de la estatal Agencia Cubana de Noticias, se pueden conocer algunos detalles de este acontecimiento deportivo que tuvo lugar en el habanero hotel Copacabana.
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El récord anterior había sido impuesto por el propio Hernández, en el mes de agosto, en Varadero. En ese entonces dominó el balón durante 62 minutos y cinco segundos.
Acerca de las diferencias entre los dos momentos, el propio deportista aseguró que en esta oportunidad tenía a su favor no solo el clima, sino que conoce muy bien el hotel Copacabana.
Le ayudó que el techo fuera más bajito y para una mayor concentración se ubicó donde coincidían los colores blanco y negro "y, en un momento determinado, me movía lentamente hacia uno u otro lado", aseguró.
También recibió un entrenamiento más intenso en los meses previos, por tanto los músculos del cuello en toda su dimensión, los de la espalda baja, la zona lumbar y los cuádriceps.
"Para este récord trabajé fuerte con la espalda alta, los hombros, pectorales y en especial el músculo del esternocleidomastoideo, que sufre mucho cuando se toca el balón con la cabeza", aseveró.
Para los próximos meses tiene pensado prepararse para la llegada del 2020, un año olímpico, y por tanto su objetivo será "poner un extra". Mientras esté motivado, confiesa, seguiré intentando romper récords.
Entre los récords alcanzados por Erick Hernández destaca el del año 2005, cuando tocó el balón en 319 ocasiones en un minuto y en octubre de 2009 al tocar la pelota con los muslos durante una hora y 28 minutos.
El habanero, de 53 años, comenzó a incursionar en la modalidad del dominio del balón en 1994, inspirado en el ejemplo del hermano Douglas Hernández, precursor de la especialidad en Cuba.
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