La ola de descontento por el déficit de combustible que ha sufrido la isla en los últimos días no cesa, a pesar de que el Ministerio de Energía y Minas ha asegurado que para este lunes deberá estar restablecido el suministro de gasolina en La Habana.
Si bien las autoridades del sector han atribuido la deuda de combustible a que existe un mayor número de vehículos circulando y, por tanto, un incremento del consumo, y han afrontado la situación trayendo carros cisterna de otras provincias, el problema no es nuevo y no existe solo en La Habana.
La explicación que dieron da risa porque está sumamente incompleta. ¿Acaso no se ha tenido en cuenta el incremento del parque automotor para prever que aumentaría el consumo? Es una vergüenza que los que deben mantener funcionando al país no sepan calcular correctamente lo que hace falta para lograrlo. Lo más cómico es que todo esto pasa a pesar de que pagamos un combustible súper caro.
“En la propia Pinar no hay ni gas y Cupet (Unión Cuba Petróleo) ni se pronuncia. Creo que esa empresa debería molestarse en darle una razón más creíble a la población. ¿Quién se traga el cuento de que hay combustible, pero no camiones para llevarlo para la capital?, afirma el taxista Ernesto Jesús, de Pinar del Río.
A la vez, el chofer José Ramírez indica que “no tiene sentido nada. Un incremento en el consumo haría que durara poco el combustible en las gasolineras, pero al menos habría algo. Sin embargo, lo que pasa es que ha imperado el desorden. Las horas que hemos tenido que esperar para adquirir combustible tienen que ver mucho con la cantidad de violaciones y maltratos que llevan a cabo los trabajadores de los servicentros para despachar.
Desde hace días hay problemas en casi todos los municipios de La Habana y hay que moverse de uno a otro buscando el combustible que uno necesita. He gastado más esta semana buscando diésel que lo que me cuesta comprarlo. Este problema empezó hace aproximadamente un mes. Ojalá Cupet cumpla con su palabra y la crisis se solucione pronto.
“De una forma u otra, me parece demasiado simple y poco profesional la respuesta. ¿Hablan de que se está consumiendo un 20 % más que en etapas anteriores y un 10 % más que el verano anterior? Es increíble entonces que ningún economista haya reparado en que el incremento de vehículos que comenzó hace meses haría que aumentara también el consumo, apunta el otrora informático.
En palabras del ingeniero mecánico Omar, de 43 años, están ofendiendo a la inteligencia del pueblo. Es más que sabido que si se intenta evitar la venta ilegal de combustible la demanda crecerá en los sitios de comercialización estatal, sin necesidad de que haya más vehículos. Que publiquen que no hay disponibilidad, como ha ocurrido en Artemisa, o que no se previó lo que está ocurriendo, pero que sea la verdad.
Por eso se habla de que aumentó el número de vehículos, pero deberían aclarar que son estatales porque a los particulares no les dan chance de comprarse uno. Casi todo el país ha estado en paro sencillamente porque la gasolina está limitada y escasa desde principios de mes. Varias amistades mías se quejan de que existe el mismo problema en Holguín, La Tunas y Granma.
“Considero que al Estado no le quedará otro remedio que limitar el combustible para usos particulares y asignarlo mayormente para la agricultura y el transporte público. El incremento del parque automotor para mejorar el transporte en la capital se desarrolla hace más de seis meses, tiempo suficiente para corregir el tiro, señala.
De acuerdo con un usuario de Cubadebate, ese sitio informó hace un tiempo atrás que el país realizó la importación de un gran número de vehículos automotor para ofrecer servicios de taxis en ruta, las famosas gacelas, motos, tractores para la agricultura, ómnibus, coches de tren, “entre otras cosas que el pueblo agradece. Ninguno de esos medios automotores utiliza otro combustible que no sea diésel.
“En el verano 2019, existe, según el funcionario de Cupet, un incremento del consumo de combustible con respecto a años anteriores, creo que esto se debe a los ómnibus de los centros estatales que tienen planes de verano para llevar a sus trabajadores a los centros de recreación y a las playas, el 98% de esos ómnibus el combustible que utilizan también es diésel. Sin embargo, el combustible que está en déficit es la gasolina (en todas sus variantes) y no el que más se consume. Hay algo que es redondo y no me cuadra, acota.
Por otra parte, a tenor con Teresa, quien maneja un Lada particular, nada de lo que están haciendo reducirá el robo de combustible porque siempre habrá una manera de que el chofer estatal le deje su tarjeta magnética al pistero y éste extraiga el combustible y se lo venda a quien vaya a comprar en efectivo. Ya tendremos combustible racionalizado
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