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Desde hace unas ocho semanas un nuevo destino resalta en el mapa de viajes de los cubanos. Ya sea para ir de compras o escapar de manera definitiva de la realidad de la Isla, Nicaragua es el país de moda.
Amén de que aún se desconocen las verdaderas causas del sorpresivo cambio en la política migratoria de Nicaragua respecto a Cuba, al facilitarse el pasado enero la entrada de los cubanos a ese país centroamericano, mediante la concesión en su embajada en La Habana de una visa de entrada única por un período de 30 días se alegraron aquellos a los cuales, como la artesana Raisa, de 42 años, le “viene bien cualquier cosa”.
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Refiere la artista que ella sabe que "allá hay tremenda pobreza y problemas de toda índole, incluso políticos, pero no más que en Cuba. Solo basta con imaginar que hasta sazones en polvo trae la gente para revenderlos por su cuenta. Yo he ido a Guyana y México, y he comprobado que en cualquier lugar uno resuelve todo lo que aquí no tiene".
“Ya fui a Nicaragua una vez y me estoy preparando para dar otro viaje. A mí me dio negocio porque le saqué de ganancia como 300 CUC. Y lo más bonito es que sacar la visa no es nada complicado, como lo era antes. Ahora solo hace falta comprar un pasaje de ida y vuelta, pagar 30 CUC en el Banco Financiero Internacional y presentarse en la embajada para que te den la visa sin mucha investigación”, explica la cuentapropista.
De acuerdo con un cubano que trabaja desde hace un año en la capital nicaragüense, “se trata de una flexibilización, no de un libre visado, aunque se la otorgan a la mayoría del que la pide y el mismo día de la entrevista. Dicen que es una forma de atraer turismo al país, pero no creo que los cubanos clasifiquen en esa categoría".
“Si bien aquí todo está más caro que en destinos como Panamá y México, creo que vendrán a hacer compras para revender todo tipo de productos en Cuba. No me parece que vengan a trabajar aquí por largos períodos porque del año pasado hacia acá muchos negocios han cerrado”, afirma.
Tania, de 50 años, quien ya tiene “en la mano” la visa para viajar a Managua, asegura que “la entrevista se limita a hacer pocas preguntas, entre ellas por qué motivos viajas a Nicaragua, y uno tiene sencillamente que responder que para turismo o ir de compras”.
Según plantea esta propietaria de una cafetería en La Habana, lo que sí es obligatorio es comprarle el boleto a la aerolínea venezolana Conviasa o a la colombiana Avianca.“Puedes cazar una ofertica que ronde los 200 CUC o pagar los más de 1.000 que cuesta normalmente el pasaje”, puntualiza.
A pesar de que en 2015 Nicaragua dio lugar a una crisis migratoria al cerrar su frontera a cientos de migrantes cubanos que buscaban arribar a Estados Unidos, hoy la situación se repite y muchos se arriesgan a llegar al país norteño para solicitar asilo político.
Desde la óptica de la doctora Ileana, “por triste que parezca, tenemos mayor nivel escolar que muchos habitantes de Nicaragua y cualquier otra nación de América Latina, pero siempre parece que estamos pidiendo limosnas por ahí, que estamos esperando a ver si otro país, como ha hecho Nicaragua, se decide a ser generoso y casi regalarnos la visa para que no nos muramos de hambre".
“Viaje y emigración son dos palabras alrededor de las cuales nos movemos constantemente. De una u otra forma, creo que lo mejor para salir de la Isla será siempre la vía legal. No obstante, que sigan llegando oportunidades como estas a ver si un día logramos vivir con dignidad".
“Ahora que ya no existe la política de Pies Secos/Pies Mojados y que los norteamericanos nos redujeron el tiempo de visas de cinco años a tres meses, la visa nicaragüense será nuestra principal vía de escape. Estoy muy segura de que los cubanos se irán de forma masiva”, concluye.
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