A principios del mes de septiembre, dos policías de Boca Ratón (Florida) conversaron durante cinco minutos con un hombre que parecía haber estado durmiendo en una camioneta en las inmediaciones de un gimnasio.
La cámara del cuerpo de uno de los agentes grabó la charla con Cesar Sayoc, quien algunas semanas después se convertiría en sospechoso de enviar más de una docena de paquetes bomba por correo postal contra figuras políticas del partido demócrata.
Durante el encuentro, Sayoc habló animadamente con los oficiales sobre sus largas horas de trabajo, y afirmó que estaba durmiendo en la camioneta porque tenía un horario agitado. También habló con los agentes sobre su apoyo al presidente Donald Trump.
Los investigadores federales consideran ahora que Sayoc, quien está acusado de cinco cargos federales y en espera de ser extraditado a Nueva York, podría haber estado planeando el “ataque terrorista doméstico” desde el pasado mes de julio.
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