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Un grupo de cubanos, retenidos en un campamento en la selva panameña, se fugaron el pasado 12 de agosto para evitar que los deportaran a la Isla, informó Martí Noticias.
Días antes las autoridades migratorias de ese país habían deportado a 10 cubanos y ellos decidieron no correr la misma suerte. Dicho campamento está ubicado en la comunidad de La Peñita, en Metetí, perteneciente a la provincia Darién.
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“Escapamos el día 12 de agosto por el río, ocultos en canoas con los indios de la zona, que cobraron 25 dólares por cada uno”, explicó al citado medio una de las mujeres del grupo que prefirió no ser identificada.
Según cuentan, se han tenido que enfrentar a la corrupción de las autoridades nicaragüenses que los extorsionan para dejarlos pasar.
Agentes del Servicio de Inmigración y de Seguridad de Fronteras (SENAFRONT) en Nicaragua “nos quitaron la ropa. A los hombres los obligaron a hacer cuclillas, buscando dinero. Nos dejan sin un medio y después nos muestran el camino a seguir”, dijo.
De acuerdo al reporte, la dirección de comunicaciones de SENAFRONT les aseguró que haría las averiguaciones pertinentes sobre el caso.
Hace tres semanas los cubanos que estaban en ese campamento denunciaron las malas condiciones en las que vivían, asimismo confirmaron que la cifra de ciudadnos de la Isla ascendía a 150.
Dijeron además que a muchos de ellos que requerían atención médica no les prestaban atención. No obstante aseguraron que regresar a Cuba no era una opción.
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