El anteproyecto de reforma de la Constitución cubana elimina el comunismo del futuro de la nación. Hasta ahora el artículo constitucional que recogía el papel del Partido Comunista de Cuba hablaba de construir el socialismo y avanzar "hacia la sociedad comunista".
Ahora esa última frase desaparece. El partido se mantiene como "fuerza dirigente superior de la sociedad y el Estado", aclarando que es "único", "fidelista" y tiene "carácter democrático" pero estará orientado a la construcción del socialismo y a preservar la unidad patriótica.
De esta forma se da un portazo a la posibilidad de legalizar partidos políticos en la Isla, pero también se renuncia al comunismo.
Si sale adelante el texto incluido en el borrador de la Carta Magna, que deberá votarse en referéndum, el artículo 3 quedará de la siguiente manera:
"El Partido Comunista de Cuba, único, martiano, fidelista y marxista-leninista , vanguardia organizada de la nación cubana, sustentado en su carácter democrático y la permanente vinculación con el pueblo, es la fuerza superior dirigente de la sociedad y el Estado para organizar y orientar los esfuerzos comunes hacia la construcción (y defensa) del socialismo para preservar la unidad patriótica de los cubanos y los valores éticos".
El 19 de abril de 1959, Fidel Castro renegó del comunismo. En un discurso encaminado a desmentir la campaña "falsa y canallesca" contra la naciente Revolución, dijo: "El pueblo de Cuba sabe que el gobierno revolucionario no es comunista".
Poco después Fidel Castro abrazó a los rusos. Tras los combates de Bahía de Cochinos, su discurso se radicalizó. El 22 de diciembre de 1961 ya confesó abiertamente que Cuba iba a construir el socialismo y se declaraba "marxista-leninista".
Ahora, el anteproyecto de reforma parcial de la Constitución cubana, enmienda la modificación que el propio Fidel Castro hizo a la Carta Magna en 2002 para dotar de máximo poder al Partido Comunista y elimina su intención de conducir a los cubanos hacia una sociedad comunista.
La desaparición del término "comunista" de la Carta Magna cubana no pasó desapercibida en la Asamblea Nacional del Poder Popular. Un diputado preguntó a Esteban Lazo por qué se quita del texto constitucional y el presidente del Parlamento cubano le explicó, en esencia, que Cuba no renuncia a la ideología marxista leninista, pero la definición de hacia dónde quiere ir el país quedó aprobada en el VI y VII Congreso del Partido. Resumiendo: los tiempos han cambiado, le vino a decir.
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