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La agencia surcoreana Yonhap ha informado que el régimen de Kim Jong-un canceló la reunión de alto nivel programada para mañana miércoles en la frontera con Corea del Sur, y que además ha amenazado la histórica cumbre con Trump, prevista para el próximo 12 de junio en Singapur.
La causa del enojo serían unas maniobras militares conjuntas que están celebrando Washington y Seúl. El régimen de Kim Jong-un las ha calificado de "provocación", y dijo que no tendría otra alternativa que suspender las conversaciones.
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El informe de la agencia norcoreana KCNA afirmó que el ejercicio de combate aéreo Max Thunder 2018 estaba en contra de la declaración de Panmunjom, firmada el mes pasado entre las Coreas, en la que acordaron suspender todos los actos hostiles entre sí.
A pesar de la explícita amenaza de cancelación del diálogo con EE.UU., el gobierno norteamericano anunció que mantenía los preparativos para la cumbre entre Donald Trump y Kim Jong-un.
En conferencia de prensa, Heather Nauert (vocera del Departamento de Estado), dijo: "No hemos escuchado nada de ese gobierno o del gobierno de Corea del Sur para indicar que no continuaríamos realizando estos ejercicios o que no continuaríamos planificando nuestra reunión entre el presidente Trump y Kim Jong-un el próximo mes".
Y añadió: "No nos adelantemos", advirtió a los periodistas. "Esta noticia acaba de salir. Necesitamos verificarla para obtener información adicional sobre eso, pero vamos a avanzar en la planificación de nuestras reuniones el próximo mes".
"Seguimos avanzando", y reiteró que la Casa Blanca de momento no ha recibido ninguna "notificación" de Pyongyang.
La reunión anulada entre las dos Coreas, por su parte, debía enfocarse en los planes para implementar una declaración oficial, surgida de la cumbre entre Kim Jong-un y Moon Jae-in celebrada el pasado 27 de abril.
Según aseguró este martes el Ministerio de Unificación del Sur ―encargada de los lazos con Corea del Norte― estaba previsto que la declaración incluyera promesas de terminar formalmente la Guerra de Corea y buscar la "completa desnuclearización".
A la espera de nuevos pronunciamientos oficiales, el encuentro de Kim Jong-un y Trump se mantiene según la agenda acordada, pero ahora a la espera de que no se produzca un brusco viraje en los acontecimientos.
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