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Uma Thurman, protagonista del filme Kill Bill, aseguró que el productor y director Quentin Tarantino la obligó a conducir un automóvil pese a que tenía un desperfecto y esto puso en riesgo su vida, ya que terminó en el hospital, reveló la artista a The New York Times.
Se trata de la escena en que la actriz conduce un descapotable a gran velocidad hasta que se sale de la carretera y choca contra una palmera. Thurman, que fue nominada al Globo de Oro por esa película, cuenta ahora que insistió en que no se sentía cómoda conduciendo el auto y que prefería que lo hiciera un experto en acrobacia.
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“Quentin entró en mi tráiler y como a cualquier director, no le gustaba escuchar: ‘No’. Estaba furioso porque le costaba mucho tiempo, pero yo tenía miedo. Él me dijo: 'Te prometo que el coche está bien. Es una carretera recta. Tienes que ir a 40 millas por hora porque si no, tu pelo no ondeará de la manera correcta y te haré repetirlo’. Pero era una trampa mortal. El asiento no fue atornillado correctamente. Tampoco era un camino recto y estaba lleno de arena”, reveló.
“El volante presionaba mi vientre y mis piernas estaban atascadas debajo de mí. Sentí un dolor abrasador y pensé: 'Oh, Dios mío, nunca volveré a caminar’. Cuando salí del hospital con un collarín ortopédico, las rodillas dañadas y una bola enorme en la cabeza debido a una conmoción cerebral, quise ver el coche, estaba muy disgustada”.
“Quentin y yo tuvimos una pelea enorme y lo acusé de haber intentado matarme. Él estaba muy enojado con eso, supongo que comprensiblemente, porque él no sentía que había tratado de matarme”, recordó.
Dos semanas después, en las que la actriz intentó en vano ver la grabación del accidente, su abogado amenazó con demandar a la productora Miramax. La firma accedió a mostrárselo, con la condición de que la artista firmara un documento que liberaba a la firma de cualquier problema futuro. Ella no lo hizo.
Thurman y Tarantino estuvieron años peleados. Finalmente, él accedió a entregarle el video después de 15 años. “No es que me importe ahora, con mi cuello permanentemente dañado y mis rodillas atornilladas”, confiesa.
La actriz, de 47 años, acusó también al productor cinematográfico Harvey Weinstein de agredirla sexualmente en 1994 en un hotel de Londres, tras el rodaje de la película Tiempos Violentos.
De esta manera, pasa a engrosar la lista de las más de 70 mujeres que han denunciado a Weinstein de diversos tipos de ataques sexual, que en varios casos incluyeron violación. La actriz reveló que no lo delató el año pasado porque no quería decir nada estando enojada.
Thurman declara ahora que el famoso productor la tiró al suelo aquel día en el hotel. Trató de ponerse encima de ella e intentó exponerse. “Hizo toda clase de cosas desagradables, aunque de hecho no me forzó”, reveló.
Una portavoz de Weinstein informó el pasado sábado que se había disculpado con ella por lo que llamó “insinuaciones incómodas”, pero recalcó que las imputaciones sobre agresiones físicas no eran verdaderas.
Por último, la actriz contó que cuando tenía 16 años y vivía en un estudio en Manhattan, acudió a un club una noche y conoció a un actor casi 20 años mayor, quien la coaccionó después, cuando fueron a su casa de Greenwich Village, para tomar una copa.
“Yo era en última instancia obediente”, evocó. “Traté de decir que no, lloré, hice todo lo que podía hacer. Me dijo que la puerta estaba cerrada, pero nunca corrí y lo comprobé. Cuando llegué a casa, me paré frente al espejo y miré mis manos. Estaba tan enojada con ellas porque no tenían sangre ni estaban magulladas. Algo así te cambia, ¿verdad? Y creo que a partir de ese momento me volví menos obediente”.
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