La investigación policial ha revelado que los tres cubanos detenidos por supuesto tráfico de personas en Costa Rica disfrutaban de un alto nivel de vida. Los tres supuestos delincuentes eran propietarios de carros y propiedades inmobiliarias de lujo.
Entre las propiedades de la familia se encontraban dos carros de lujo comprados recientemente, valorados en más de 36.000 dólares. A nombre de sociedades vinculadas a estos delincuentes figuraban también un Hyundai Accent 2001 y un nuevo modelo de Audi.
Por otro lado, el líder de la organización, identificado como Roberto Gallardo Muñoz alias “zurdo”, y su pareja fueron detenidos en una lujosa propiedad, situada en el cantón costarricense de Moravia, con valor aproximado de un millón de dólares.
Según investigaciones de la Policía de Migración el grupo cobraba hasta 15.000 euros a cada uno de los cubanos. Una vez pagaban esta cantidad, los delincuentes movilizaban por aire a migrantes cubanos desde la Isla hasta Ecuador y desde allí viajaban a Perú, Costa Rica y finalmente México, desde donde luego buscaban ingresar a Estados Unidos.
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