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La quema de un cachorro vivo en la ciudad de Manzanillo, al oriente de Cuba, ha levantado indignación entre la comunidad internauta atenta al acontecer del país, que ha tomado el lamentable suceso como un detonante para volver al debate sobre la urgencia de un marco legal legítimo para la protección de los animales en la isla.
El video de este acto criminal cuenta con 16 millones de reproducciones en Facebook y ha despertado un sinnúmero de reacciones en otras redes sociales entre las que destacan las de aquellos que cuestionan la divulgación de dichas imágenes ya sea por “morbo” o por “denigrar a Manzanillo”.
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Giordan Rodríguez Milanés, comunicador y periodista granmense, fue el responsable de que el video llegara a Internet.
Según explica, fue la única manera que encontró de denunciar el hecho, luego de intentarlo sin éxito ante las autoridades de la ciudad.
“Cuando Picasso pintó Guernica, un oficial nazi le preguntó por qué había hecho eso, y el pintor español respondió: "Eso lo hicieron ustedes, yo únicamente lo pinté”, dijo hoy en Facebook el joven. "Yo no quemé al perrito, ninguna de las personas que han hecho viral en las redes sociales el horripilante video, quemaron el perrito; los que lo quemaron, todavía andan sueltos por las calles de Manzanillo, enseñándole a sus amigos de su propia calaña el video como si fuera una hazaña”, expone.
El periodista relata que tuvo problemas con las autoridades al tratar de denunciar el hecho, un día antes de publicar el video. “Los mismos que han permitido que esos tipos sigan sueltos arremetieron, como acostumbran, contra este servidor, echándole la culpa al mensajero de la aberración del mensaje”, escribió en su muro de Facebook.
Milanés también criticó la postura asumida por varios periodistas cubanos, incluído el propio Presidente de la UPEC, Antonio Moltó Martorell quien, en el programa "Hablando Claro" de la emisora Radio Rebelde criticó a la persona que subió el vídeo a Facebook.
Al respecto el joven dijo: “Lo subí porque era -es- necesario llamar la atención sobre el deterioro social de esta ciudad en la que vivo y que amo como se ama la patria chica, en la que quisiera vivir siempre, con la dignidad plena a la que aspiraba Martí para los cubanos. Lo subí porque quienes tienen que liderar al pueblo, a las miles de personas decentes que viven en esta ciudad, para llevar a cabo empeños nobles y atacar las indisciplinas sociales, pierden en mi opinión demasiado tiempo preocupados por quienes pensamos distinto o quienes pensamos que se puede -y se debe- hacer un periodismo a camisa quitada en vez justificaciones y propagandas en las que nadie cree, porque la realidad siempre es más fuerte que cualquier mediatización.”
Según han hecho circular varios activistas por los derechos de los animales, los delincuentes son Michel Pompa, hijo de Luis Pompa (alias Wichi), quien reside detrás del restaurante “Variedades”, al lado de la carnicería el Delfin en Luz Caballero, esquina Loynaz.
El hombre, que junto a un amigo de alias El Ninja encerró al cachorro en una caja y le prendió fuego para luego soltarlo a la calle, es un conocido delincuente de Manzanillo y ha estado preso en varias ocasiones.
“El animalito salió desprendido tratando de salvar su vida, mientras los "hombres" reían a malsanas carcajadas”, narra en sus redes sociales el reportero Roberto Mesa Matos, de CMKX Radio Bayamo.
“Hasta dónde es capaz de llegar el hombre con sus actitudes despreciables y crueles?, no pudo nadie interceder por ese acto horrible?, dónde estaban los encargados de establecer el orden y la tranquilidad? y los líderes comunitarios?, qué ejemplo daremos a nuestros niños y adolescentes de amar a los animales?”, se pregunta.
Por su parte, la asociación animalista Protección de Animales de la Ciudad (PAC), publicó un comunicado repudiando el hecho y volviendo a recordar la necesidad de contar con una Ley para la protección de estos seres afectivos, la cual está a la espera de aprobación por parte de la Asamblea Nacional.
“Una persona así resulta peligrosa en extremo. ¿Cómo vivir tranquilos teniendo un vecino que sabemos capaz de cometer semejante acto y encima vanagloriarse? ¿Es posible pasar por al lado de esta persona y evitar los sentimientos negativos que provoca dentro de cada uno de nosotros? ¿Cómo tener la certeza de que un día no hará lo mismo a un semejante, dígase mujer, niño, anciano?”, reza la nota de la organización.
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