Ubicado en el Parque de Guanaraya, en pleno corazón del Macizo de Guamuhaya o Sierra del Escambray se encuentra uno de los sitios más apacibles y paradisíacos de Cuba. Imbricados con el entorno, entre las montañas, se hallan decenas de estanques naturales y cascadas dentro de las que El Nicho destaca por su singular belleza y armonía con el entorno.
Rodeadas de numerosas tonalidades de verdes, estas cascadas casi vírgenes -en parte por lo caprichoso del entorno- regalan al visitante unas imágenes de naturaleza excepcionales y únicas. La riqueza de la flora, con sus varios helechos y orquídeas justifican la inclusión de estos parajes en los sitios que reseñan lugares de interés en Cuba. Las pocetas naturales de aguas cristalinas, calman a los viajeros en los días estivales de mayor calor.
Si las pocetas y cascadas no fueran atractivo suficiente de esta zona, en el mismo corazón del macizo montañoso Guamuhaya se encuentra también la Cueva Martin Infierno, catalogada como Monumento Nacional y poseedora de una estalagmita de 67 metros de altura, la mayor de toda América Latina. La cueva destaca, además, por sus “flores de yeso”, únicas formaciones cálcicas de su tipo en Cuba y por servir de refugio natural para una colonia de los llamados murciélagos mariposa, los más pequeños del mundo. La riqueza de este ecosistema lo convierte en hábitat privilegiado de especies en riesgo de extinción y endémicas com el tocororo, los halcones de montaña o los búhos sijú.
Alejado del ruido, estrés y ritmo acelerado de las grandes urbes se encuentra este segmento de naturaleza bien conservada e intacta. Si con un poco de paciencia y cierta dosis de espíritu aventurero se logran pasar los rústicos puentes y se consigue ascender, el visitante recibirá en recompensa las vistas desde el mirador de un entorno único de naturaleza y vida.
(Foto tomada de Internet)
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