Es algo discriminatorio decir que unos faros son más importantes que otros, dada la significación que cada uno de esos gigantes luminosos tienen para los navegantes en cualquier lugar del archipiélago cubano en cual se encuentren.
Así que partiremos diciendo que los más importantes faros de Cuba son todos, dado que constituyen la guía del marinero en el mar, tanto en la calma como en la tormenta, que lo lleva siempre a puerto seguro.
Pero atendiendo a las dificultades que puedan presentarse para la navegación en determinados lugares por tener características geográficas más complejas, existen varios faros en Cuba que son especialmente significativos.
Estamos hablando de los que conformaban el servicio de alumbrado marítimo de la costa norte de La Mayor de las Antillas, favorecían la navegación por el Canal viejo de Bahamas y ayudaban a las embarcaciones a evitar los arrecifes que se extienden desde Punta Maternillos hasta Cayo Piedras del Norte. También del fanal que socorre a las naves que deben surcar El Paso de los Vientos.
El Faro de Punta de Maisí o de La Concha
Como se le denominó en honor del Capitán General de la isla, José Gutiérrez de la Concha. Tiene 166 años. Comenzó a construirse en 1857 y se concluyó en 1861. Su misión es guiar a las embarcaciones que tienen que atravesar el peligroso Paso de los Vientos, en el extremo más oriental de Cuba, perteneciente a la provincia de Guantánamo.
El citado Paso de los Vientos es un estrecho de tan solo 80 kilómetros de ancho y 1700 metros de profundidad que une al océano Atlántico y al mar Caribe. Se ubica entre Cuba y la isla La Española en la cual se encuentran Haití y República Dominicana.
La altura del faro de La Concha es de 121,9 pies y tiene una potencia de 3790 bujías. Hoy su luz blanca se oculta tres veces seguidas y alterna con un destello simple cada 20 segundos. Sin embargo la inicial era una mecha, que fue reemplazada por una lámpara de aceite, luego (1955) le siguió una de petróleo y presión, en los 70 se situó una luz eléctrica potente y en los 80 fue sustituida por un dispositivo mecánico que emite destellos y gira 240 veces por hora y requiere menos electricidad.
Posee una torre de sillería que se levanta 37 metros sobre el nivel del mar y es rematada por el reflector, cuyo alcance es de 27 millas náuticas. Este gigante no solo guía a las embarcaciones sino también a los aviones que transitan por la región.
El Faro Colón
Llamado así en honor al almirante Cristóbal Colón, se localiza en Punta Maternillos, en Cayo Sabinal, Nuevitas, Camagüey. Este lugar pertenece al archipiélago Sabana, Camagüey, región en la cual resulta mucho más estrecho el paso por el Canal Viejo de las Bahamas.
El fanal actual cuenta con un potencial lumínico garantizado por un sistema eléctrico planta Ruston de 4kw, lámpara del 1500 Wat, que equivale a 500 mil candelas, que emite un destello de luz blanca cada cinco segundos, con un alcance potencial de 38 millas y el real de 19. El foco se halla a 52,5 metros de altura y 53,5 sobre el nivel del mar. Posee una luz auxiliar para emergencias que consiste en una linterna de 300 mm de diámetro, equipada con un dispositivo MM-3 de destello, 6 baterías de 2 volt y 500 A/h, así como una bombilla de 12 volt y 60 Watt.
El acceso al faro es garantizado por el pedraplén Sabana-Camagüey que abrió a Cayo Sabinal con sus espectaculares costas mundo, para que sus visitantes que sean amantes del submarinismo puedan encontrar y disfrutar, ayudados en el Centro Internacional de Buceo la barrera coralina donde pueden observarse los antiguos navíos que se hundieron por no contar con un Faro Colón que iluminara sus camino.
Faro de Cayo Paredón Grande
Una obra ingenieril cubana de altísimo valor que cubre toda la zona central de la isla con su luz y que se erige sobre un abrupto peñasco al norte del cayo, perteneciente al archipiélago de Jardines del Rey, situado al norte de la provincia de Ciego de Ávila. A este fanal se llega por una carretera de 40 kilómetros de longitud que nace en Cayo Coco.
Fue posible gracias al talento único del gran ingeniero cubano Don Francisco de Albear y Lara. La obra resulta toda una rareza pues la torre del faro, aún activo y en funcionamiento, se alza unida a la antigua vivienda de los torreros y es de una fortaleza tal que no ha sido abatida ni por ciclones ni por otros fenómenos meteorológicos peligrosos.
Se trata de una edificación nada menos que de hierro fundido, de 48 metros de altitud, 156 escalones y 9 956 tornillos. Auxilia con su luz a los navegantes que se desplazan por el Canal Viejo de las Bahamas, un corredor marítimo internacional de gran importancia. Su linterna emite tres destellos de luz blanca que parecen relámpagos, se mantienen por quince segundos y alcanzan 36 millas náuticas.
Como la mayoría de los faros su iluminación inicial fue con aceite, luego con petróleo y finalmente con electricidad, que elevó su potencia a 158 mil bujías que proyectan la luz a unas 18,9 millas de distancia.
Está rodeado por una de las más bellas playas vírgenes de Cayo Paredón Grande y resulta un lugar paradisíaco para observar la naturaleza. A este faro se accede por un pedraplén de 33 kilómetros realizado sobre el mar.
Faro del Castillo de los Tres Reyes del Morro en La Habana
El fanal original del Morro de La Habana, una de las primeras fortalezas levantadas por los españoles en América, hace más de cuatrocientos años, se alimentó con leña hasta el siglo XVIII, con gas a principios del XIX y luego con aceite. Finalmente fue demolido y el Cuerpo e Ingenieros erigió uno nuevo de sillería con 45 metros de altura sobre el nivel del mar, en 1844 al cual se le dio el nombre de Faro de O’ Donnell.
En este faro se experimentó un invento que revolucionó la iluminación marítima de aquellos tiempos: la linterna ideada por el ingeniero francés Agustín Fresnell. Sus resplandores que duraban entre 5 y 6 segundos ¡se divisaban a 40 millas de distancia! gracias a lentes escalonados, una linterna central semejante a un prisma octogonal y una máquina rotatoria. Un siglo más tarde, en 1945, todo el sistema de alumbrado del castillo fue electrificado.
Faro Roncali
Situado en el Cabo de San Antonio, el extremo más occidental de Cuba. Protege con su luz a los navíos que transitan por las difíciles aguas del extremo más occidental del archipiélago cubano.
Se cuenta que antes de que se construyera los marineros solían guiarse por un enorme árbol de la zona, que por supuesto no era posible ver en la noche y lógicamente la cantidad de accidentes en esa región más occidental de Cuba era realmente alarmante. Por eso muchos países cuyas naves transitaban por esa vía marítima se quejaron y esto obligó a que se edificara el fanal.
Su nombre se debe a que se terminó de construir en el gobierno de Federico Roncali, Conde de Alcoy, quien accedió a que se utilizara su apellido para denominar el faro, situado en un montículo rocoso natural y que se eleva alrededor de unos 10 metros sobre el nivel del mar, hecho de piedras redondeadas con un espesor mayor a 25 centímetros sacadas con pico.
La altura del faro es de unos 25 metros desde la base hasta el lugar desde el cual se proyecta el haz de luz que es posible apreciar a 30 kilómetros y la frecuencia es de dos destellos cada 10 segundos.
El Faro de Cabo Cruz o Faro Vargas
Se encuentra en el extremo sur de Cabo Cruz, la provincia Granma. Tiene de 32 metros de altura, una altitud focal de 34 y proyecta un destello blanco cada 5 segundos.
Fue edificado por el Cuerpo de Ingenieros Civiles de Obras Públicas e inaugurado el 5 de mayo de 1871.Inicialmente se le llamó Faro Vargas, en homenaje al brigadier Carlos de Vargas Machuca, comandante del Departamento Oriental en la época. Se compone de la Casa del Farero y el fanal. Cabo Cruz es el punto por donde el mar caribe entra al Golfo de Guacanayabo, sitio en extremo peligroso para navegar debido a la presencia de arrecifes coralinos.
Para levantarlo se utilizaron bloques de piedra 500 kilos de peso. Posee escaleras de 155 peldaños en forma caracol que llegan hasta la cúpula. La casa tiene un solo piso con planta cuadrada, paredes son de mampostería y el techo de tejas criollas. La edificación tiene más de 15 habitaciones que se despliegan alrededor de un patio interior y se comunican a través de un corredor en forma de O.
La lámpara inicial era de aceite de oliva. Hoy, la cúpula del faro está hecha de acero níquel y equipada con una óptica francesa que funciona a partir de un sistema de cuerda, y un bombillo, cuyo alcance lumínico de 36 millas náuticas y el geográfico de 17 millas de distancia.
Faro de Punta Lucrecia
Centenario fanal, localizado en la costa norte de Holguín, que protege a los navíos que surcan las aguas de la costa nororiental de la isla. Es uno de los cien faros más importantes del mundo por su singular posición geográfica, en el extremo más saliente entre las bahías del Naranjo y la de Nipe.
La costa que lo rodea es baja y circundada por arrecifes que hacen de ella un sitio prácticamente inaccesible incluso para las embarcaciones pequeñas.
Cuenta en su interior con una escalera de caracol de 168 escalones que conduce a la cámara de iluminación, dotada de una moderna tecnología que lleva la luz a 42 millas de distancia. Su interior posee un patio rodeado por un pórtico cubierto, en cuyo centro se halla el aljibe que se asemeja al brocal de un pozo y permite acceder a las viviendas y a una peculiar habitación muy interesante, en la cual se preservan con celo fotografías, objetos y documentos relacionados con este faro.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: