En los últimos años, son varios los cubanos en Miami que han adoptado la fe cristiana ―de carácter protestante― y con ese fin han protagonizado, previamente, diversas ceremonias que escenifican su ruptura con las religiones afrocubanas.
Para ello se les indica que deben romper los recipientes o santos, quemarlos y darle todo tipo de trato vejatorio, lo que desde luego, para un creyente en las religiones afrocubanas supone un trato tan irrespetuoso con su fe, como lo es para un cristiano que se queme un crucifijo.
“Rómpelo, tíralo, bótalo”…son las palabras que más se repiten en una ceremonia que va acompañada de la frase “en el nombre de Jesús”.
En otro vídeo, con gran pasión, José Rodríguez ―quien se define a sí mismo como ex-babalao― refiere cómo dejó de cultivar la santería para “aceptar a Jesús” y convertirse al cristianismo.
En un exaltado discurso que ronda los nueve minutos, este cubano explica el cambio que ha dado su vida luego de haberse acogido a su nueva fe.
Rodríguez llega a expresar que Cuba es un país que nunca saldrá adelante ―ya sea con Fidel o sin Fidel― porque gran parte de los ciudadanos de la Isla viven demasiado atados a la religiosidad afrocubana, que no produce nada bueno, según declara.
La iglesia a la que se ha suscrito José Rodríguez es “New Hope In Christ Ministry”, que desde el año 2003 se asentó en la ciudad de Hialeah, en aquel momento con los Pastores Edgar y Mónica Ordóñez, que fueron enviados a esa ciudad, según recoge su web “con el propósito de comenzar una obra teniendo como meta establecer y expandir el reino de Dios”.
Y con la misión de “predicar las buenas nuevas del evangelio del reino de Dios a toda persona; para luego afirmar, consolidar, alimentar, sanar, equipar y dar a cada individuo que ha conocido a Jesús, para que sirva en la obra del ministerio y en el reino de Dios”.
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