El humorista cubano Rigoberto Ferrera ha reflexionado sobre las predicciones acerca del inminente paso de un fenómeno meteorológico por la parte occidental de Cuba.
Poco más de 10 segundos bastaron al humorista para arremeter con agudeza contra la crítica situación que atraviesa Cuba en todos los órdenes.
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“Dice que pasará un ciclón y trae apagones, hambre, miseria, desesperanza. ¿Pasará o ya está aquí, mis amigos?”, dijo Ferrera en un video publicado en su cuenta de Instagram que ha sido muy aplaudido por sus seguidores.
Con sus palabras, Ferrera consiguió demostrar una vez más que la más certera de las críticas puede resumirse en apenas un puñado de palabras, en este caso una enumeración en la que aludió a sensibles ámbitos de la realidad actual en la isla, agravada por la ineficacia de los gobernantes y los desatinos de la naturaleza.
“Ni Rubiera lo dijo tan claro”, “Hay que hacerte una estatua”, “Ciclón tenemos desde varias décadas atrás”, “Eres un huracán de risas, Rigo”, fueron algunos de los comentarios que se pueden leer en la publicación.
En marzo pasado, Ferrera arremetió en contra de los gobernantes cubanos. "Hay muchas formas de matar a una persona: apuñalarlo con un cuchillo; quitarle el pan; no tratar su enfermedad, condenarlo a la miseria; hacerlo trabajar hasta desfallecer; impulsarlo al suicidio, enviarlo a la guerra, etc… Solo lo primero está prohibido por nuestro Estado", expresó en otro video que causó la admiración de sus seguidores.
La situación en Cuba es crítica y se ha agudizado con la presencia de varios organismos ciclónicos en la zona al sur de la isla.
El posible ciclón tropical 18 está en continua organización en el Caribe occidental y se espera que en las próximas horas ya alcance la categoría de tormenta.
Los modelos de pronósticos trazan una trayectoria en la que este fenómeno, ya convertido en huracán para el próximo miércoles, impacte la zona occidental de Cuba.
Las autoridades meteorológicas han advertido sobre la posibilidad de precipitaciones acumuladas de entre 3 y 6 pulgadas, con áreas puntuales que podrían recibir hasta 9 pulgadas.
Estas condiciones aumentarían el riesgo de inundaciones y deslizamientos de tierra en el territorio cubano, especialmente en zonas ya vulnerables por su topografía o infraestructura.
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